El fuego, que solo causó daños materiales, fue provocado por un rayo, a juzgar por los primeros elementos que manejan las autoridades locales. Foto: Wikicommons
Los tres cuadros que el Louvre había prestado al Museo Marítimo de la isla normanda de Tatihou fueron destruidos el pasado martes 18 de julio de 2017 en un incendio, junto con otros dos centenares de obras, informó la pinacoteca.
El fuego, que solo causó daños materiales, fue provocado por un rayo, a juzgar por los primeros elementos que manejan las autoridades locales. Sin precisar sus títulos, el museo parisino explicó que tres cuadros de su colección habían sido “desgraciadamente destruidos en el siniestro” ocurrido en esa isla cercana de las costas de Cherbourg.
El Louvre expresó igualmente “su más viva solidaridad con los equipos del museo de Tatihou” y del Consejo Departamental de La Mancha que lo gestiona. El consejo explicaba en un comunicado los detalles del grave incendio, declarado hacia las 17:30 del martes en las reservas de esa institución, que expone obras relacionadas con el mar.
En declaraciones al diario Ouest-France, el director del Patrimonio y de los Museos de La Mancha, Alain Talon, calculó que los alrededor de 200 cuadros destruidos representan una pérdida financiera de USD 2,3 millones.
Según Talon, los préstamos del Louvre desaparecidos son dos: ‘La vente du poisson’, pintada en el siglo XIX por Alexandre Casati, en depósito en la isla desde 2005, y una pintura marina de la escuela holandesa del siglo XVII.
Las pérdidas incluyen la desaparición o graves desperfectos en varios miles de piezas etnográficas relacionadas con el mundo marítimo, agregó. Se da la rara coincidencia de que la brusca lluvia torrencial que azotó París en la noche del 9 de julio llegó a dañar el barniz de de las ‘Quatre Saisons’, de Nicolas Poussin, y ‘Triomphe de Mardochée’, de Jean-Franois de Troy, expuestos en la Sala de las Siete Chimeneas.
En un comunicado, el Louvre comunicó días después los detalles de aquel primer siniestro, en el que la lluvia inundó los espacios dedicados al Arte del Islam y del Mediterráneo Oriental, hundió el techo de una sala y fue preciso evacuar de manera preventiva el departamento de Antigüedades Egipcias.
En otras secciones, como en las salas de pintura del segundo piso del ala Sully, donde también se evacuaron obras de forma preventiva, el agua dejó sus huellas en las paredes, precisó el museo.