Cuando el espacio de una maceta es limitado para la planta que habita en ella es momento de un cambio. Foto: Pixabay
Para tener plantas en casa se necesita de cuidados mínimos que nos permitan mantenerlas en buen estado. El uso de macetas es habitual cuando se está incursionando en el mundo de la jardinería, ya sea en interiores o exteriores.
Por lo tanto, es necesario identificar el momento en que las plantas requieren un cambio de maceta. Algunas de las particularidades que se podrán apreciar para realizar esta transición serán que la tierra del espacio en el que vive la planta se ponga dura o se vea en mal estado y pobre en nutrientes.
Asimismo, se debe prestar atención cuando la planta luce deshidratada, o si ha crecido demasiado y el espacio resulta insuficiente, así lo menciona la ingeniera agrónoma Ximena Buenaño, de Jardines en todas partes.
La especialista indica que otro motivo para cambiar de maceta es cuando la planta queda encharcada en el agua del riego. En estos casos las raíces necesitarán oxigenarse por lo que deberá ser trasladada a un medio con suficientes nutrientes para alimentarse adecuadamente.
Si la maceta se encuentra en malas condiciones o tiene fisuras en su estructura también es señal para cambiar a la planta a otro espacio.
El traslado debe ir acompañado de un sustrato nutritivo y de buena calidad. El sustrato es la superficie en la que habita la planta, la misma que deberá ser una mezcla de tierra negra, hojas picadas, cascajo, humus y materia orgánica.
La agrónoma señala que colocar a la planta directo en el suelo urbano podría ser un error porque este es muy pobre y no contiene lo necesario para que la planta crezca y se alimente bien.
Adicionalmente, al momento de realizar la plantación en otra superficie es necesario hacer una revisión de la raíz para determinar si esta requiere ser podada. Si parte de la raíz no luce bien o está podrida lo mejor será cortar esa área.
Remover la tierra de las plantas, una vez al mes, ayuda a que estas oxigenen sus raíces. Foto: Pixabay
El riego es indispensable para que la planta sobreviva y mantenga un crecimiento normal. La cantidad de agua dependerá del clima. Si hace mucho sol las necesidades hídricas de la planta son mayores a cuando la temperatura baja y la lluvia se hace presente.
Lo mejor será verificar el sustrato en el que está la planta, el cual no debe estar ni extremadamente mojado, ni muy seco. Lo ideal es que la tierra permanezca húmeda para que la especie siempre cuente con agua.
Buenaño recomienda remover el sustrato al menos una vez al mes cuando se ha cambiado de maceta. Esta actividad se la puede realizar con una pequeña pala de jardinería y permitirá que las raíces se oxigenen y que el riego sea el óptimo.