Los rumores sobre la muerte del cantante mexicano Luis Miguel volvieron a hacer eco en los sitios de farándula de Internet y en la red social Twitter, el fin de semana.
La especulación sobre su estado de salud no dejó de ser comentada a escala mundial desde mediados de abril, cuando surgió la noticia sobre el internamiento del cantante en el Hospital Cedar’s Sinai de Los Ángeles.
Desde ese momento se dijo que tras una cirugía estética su estado era grave y se encontraba en coma irreversible. Nada se sabe sobre cómo evolucionó tras la intervención quirúrgica. Los usuarios de la Internet incluso afirmaron que el ‘Sol de América’ había fallecido el pasado sábado a las 07:00 en Los Ángeles.
Según los medios mexicanos, hace algunos días, el artista debía someterse a una prueba de ADN. Sin embargo no lo hizo, lo cual incrementó todavía más los comentarios en la Internet.
Lo que más generó noticia ayer fue que este fin de semana en Twitter, cientos de fans hicieron correr la versión sobre la posible muerte del cantante. Información que según los usuarios de la red social habría sido lanzada por la prensa estadounidense.
Los medios mexicanos estaban preocupados por el hermetismo en su entorno. Les llamaba la atención la ausencia de una versión oficial. En el sitio del diario El Universal, el miércoles pasado, se publicaron decenas de mensajes de sus fans, quienes a la vez exigían que se emitiera una respuesta urgente.
Pese a los rumores, personas allegadas al cantante dicen que se encuentra estable y recuperándose en su casa. El Universal de Venezuela tranquilizó a los fanáticos al publicar la declaración de Felipe Viel. El presentador chileno, que reside en Estados Unidos, tiene un vínculo muy cercano con el cantante.
Este aseguró a través de Twitter : “Luis Miguel no está grave de salud… repito… no está grave”.
En la última conferencia de prensa ofrecida por Luis Miguel en la Ciudad de México, varios reporteros cuestionaron su hermetismo. En esa época se había casado con Aracely Arámbula y había nacido su primer hijo.
El cantante dijo: “No es mi obligación compartir mi vida. Y en todo caso debería ser algo recíproco, recibir un trato respetuoso de los medios y en esa medida, yo podría responder”.
El carácter inaccesible del cantante es también una costumbre de la oficina de prensa de su disquera y de su departamento de relaciones públicas, que hacen poco caso a los rumores.
Durante los últimos 20 días no ha habido un pronunciamiento oficial. Hasta ayer, ningún familiar, amigo cercano del artista ni su compañía discográfica, se han pronunciado al respecto.