En este 2022, la Papaya Dada celebra su ‘fiesta rosada’ con chicha radioactiva, género que la agrupación ecuatoriana acuñó como parte de su identidad musical.
La agrupación ofrecerá un concierto para festejar 15 años de trayectoria junto con invitados especiales, el próximo fin de semana, en Quito.
La reinvención de la música popular
La chicha no solo se toma como un macerado del maíz, sino que también se baila como un ritmo tropical andino de origen popular.
“Es un sonido popular, cargado de colores melódicos andinos con instrumentos tropicales”, explica Esteban Portugal, fundador de la Papaya Dada, quien ha dedicado todo su conocimiento y talento a refrescar la identidad de este ritmo tradicional en los últimos 15 años.
En las últimas décadas, dice Portugal, fueron desapareciendo las formas más tradicionales de tocar la chicha hasta convertirse en una fórmula que se estandarizó en la escena musical.
En manos de la Papaya Dada, la reinvención de este ritmo adoptó el nombre de chicha radioactiva. Este sonido se proyecta como la máxima expresión del mestizaje musical, que se nutre de múltiples corrientes musicales y la experimentación con distintos ensambles e instrumentos.
“Queríamos tener una visión propia de lo que es la chicha. Somos un grupo de mestizos urbanos que crecimos escuchando rock, hip hop y otras influencias musicales que se han integrado a la chicha hasta volverla radioactiva”, explica el director, compositor y productor del grupo.
15 años fermentando la chicha radioactiva
La Papaya Dada nació en el 2007 como un cuarteto de jazz que se formó a partir de un proyecto académico.
En el 2011 aparece el primer disco titulado ‘Variaciones sobre desdichas’, un experimento que fusiona distintas manifestaciones de la música popular ecuatoriana con los sonidos del jazz.
El segundo disco es un ‘No disco’ publicado en 2015 con una mezcla de estilos muy variados. En el 2017 finalmente nace la ‘Chicha radioactiva’. En esta placa discográfica se mezclan los sonidos de la tradicional banda de pueblo con el pop, la salsa y el jazz.
Limitados por el confinamiento, la Papaya Dada decide lanzar su cuarto álbum ‘Desde la luna’. El disco fue grabado en vivo y transmitido en ‘streaming’ reafirmando el estilo alegre y bailable de la chicha radioactiva.
Durante la pandemia también se publicó una edición muy limitada de un disco llamado ‘El abismo’. Una nueva edición mejorada y ampliada de este proyecto se encuentra en camino.
Portugal reconoce que el camino hacia la chicha radioactiva se ha ido definiendo también con el aporte de más de 100 músicos que han pasado por las filas de la agrupación.
Entre esos músicos de formación académica y popular hubo artistas de Colombia, Venezuela, Cuba y, por supuesto, Ecuador. Actualmente son nueve músicos en escena.
“Cada uno viene cargando lo que uno es, lo que ha vivido, comido y respirado y eso le aporta una visión más amplia al proyecto”, dice el director musical.
Una fiesta rosada con padrinos y madrinas
En 15 años de trayectoria, la Papaya Dada ha compartido con el público canciones dedicadas a la fiesta y al zapateo, así como temas que hablan sobre los amores pasajeros, imposibles, olvidados y eternos. El repertorio también incluye un par de temas inspirados en el espacio y las estrellas, que amplían el espectro temático.
En los últimos tres años la agrupación solo ha tocado en vivo dos veces. Esa ausencia, condicionada por los confinamientos y otras circunstancias fuera de control, termina este fin de semana.
La agrupación regresa en vivo a Quito con la Fiesta Rosada de la Papaya Dada. En este concierto temático de aniversario compartirán los mejores temas de su repertorio y algunas canciones nuevas.
Para celebrar este aniversario musical se bailará el vals y también habrá pastel que se compartirá con los asistentes. El grupo también estará acompañado por sus padrinos y madrinas. El show también contará con la participación de Tierra Canela, Don Medardo y sus Players y La Sonora Dinamita.
El show se realizará el sábado 10 de septiembre a partir de las 19:00 en el Club La Campiña, en Quito. Las entradas están a la venta en el portal de Passline.