Antes de que protestaran en una catedral de Moscú contra el presidente ruso Vladimir Putin, las roqueras de la banda de punk Pussy Riot hicieron furor con sus radicales acciones artísticas.
Sin embargo, ha sido su polémica oración-punk contra el que fuera Jefe de los Servicios Secretos lo que ha dado fama a las artistas. Músicos de todo el mundo, como Madonna o Sting, y estrellas de cine, como Danny DeVito y Stephen Fry, han pedido la libertad de las tres encarceladas.
En Rusia, sin embargo, el mundo de la cultura está profundamente dividido, pero no solo por el trato dispensado a las Pussy Riot, sino al arte moderno en general. No pocas personalidades rusas del mundo de la cultura y del espectáculo opinan que la banda de punk tan solo actuó en la catedral del Cristo Redentor en Moscú (lugar sagrado de los cristianos ortodoxos rusos) para provocar y ganar notoriedad.
“Lo hicieron por publicidad barata y no por el bien del país”, dijo Anastasia Volochkova, una de las figuras más conocidas del ballet. “Que estas chicas estén en prisión es un regalo, su momento de gloria”. Volochkova contradice así a parte de la élite cultural que defiende el derecho a expresarse libremente, como las Pussy Riot.
La mayoría de los rusos, sin embargo, rechaza esta postura. Antes, el director de cine y actor Nikita Mijalkov (‘Quemado por el sol’) condenó la acción de las roqueras porque con ello estaban hiriendo los sentimientos de los creyentes.
El cineasta, que ha sido distinguido con el Oscar y es amigo de Putin, advirtió en contra de una “histérica dictadura del liberalismo” en Rusia.
En cambio, muchos otros personajes de la cultura prefieren no pronunciarse sobre los procesos políticos, por temor a que haya repercusiones en su trabajo.
El caso de las Pussy Riot está polarizando a la sociedad rusa como en pocas ocasiones ha ocurrido. Cada vez más escritores, gente del cine, entre ellos seguidores de Putin, así como músicos y otros artistas se han solidarizado con la protesta de las roqueras, aun cuando no compartan su punto de vista artístico.
El grupo de las Pussy Riot, con sus tres integrantes encarceladas: Nadeshda Tolokonnikova (de 22 años), María Alyojina (de 24) y Yekaterina Samuzevich (de 30) “marca una tendencia en el mundo del arte”, dijo el investigador cultural Alek Epstein, quien acaba de presentar su catálogo ‘Arte en las barricadas’.
Este trabajo sale a la luz días antes de que se conozca el fallo en el juicio, este viernes, de las tres acusadas por vandalismo y odio religioso. Un juicio con críticos alrededor del mundo.