Otra noche de jazz con un toque de ska, rock y cumbia

Mango Blue. (EE.UU. - Ecuador). El grupo es una energética banda con base en Nueva York, cuya música, afrolatina y mundial, crea refrescantes sonidos.

En la quinta noche del Festival Ecuador Jazz , y con la sala del Teatro Sucre a reventar, las bandas Puerto Candelaria (Colombia) y Mango Blue (EE.UU.-Ecuador) encantaron con sus fusiones de estilos y ritmos a un público ávido de nuevas propuestas y sonidos.
Cargada de una irreverencia delicada e inteligente, los seis miembros de Puerto Candelaria cuestionan con su música la aventura que significa vivir en Colombia y ser de Medellín. Sus reflexiones estuvieron presentes en un repertorio en el que el jazz se diluye en otros ritmos como el vallenato, la cumbia, el rock, el ska, algo muy original y sonoro.
Sus integrantes, acompañados por el piano, el saxo, el trombón, la percusión y el bajo, lograron un espectáculo alegre y gracioso.
“¿Saben dónde queda Puerto Candelaria?”, preguntó el pianista y director, Juancho Valencia. “Queda en la imaginación de los artistas de Puerto Candelaria”, concluyó, y se escucharon risas.
Didier Martínez, integrante de la banda (percusión), dijo que la propuesta de Puerto Candelaria es incorporar elementos y ritmos musicales sin dejar de lado la esencia de la música colombiana. “Por medio de la fusión de ritmos logramos crear diferentes sensaciones en un mismo tema”.
Virgilio Correa, un espectador, quedó “muy satisfecho con el espectáculo de las dos bandas. Fue un show muy bueno”.
La otra protagonista de la noche fue la banda Mango Blue, liderada por el bajista y cantante ecuatoriano Álex Alvear.
Mango Blue logra destacarse mezclando una variada gama de influencias musicales, desde rythm and blues, jazz y funk a raíces caribeñas, especialmente de Puerto Rico, con una marcada base rítmica que toma de las tradiciones afrolatinas.
Un grupo mixto de ocho artistas -batería, bajo, piano, saxofones, timbales, bongos y congas- ofreció un espectáculo alegre, variado y entretenido.
María Fernanda Salazar fue otra espectadora satisfecha.
“El concierto estuvo regio, los dos grupos son excelentes. Destaco de Puerto Candelaria la capacidad que tiene de no perder sus orígenes, de no perder el sabor, y la esencia de la música colombiana”, fue su versión.