El poeta y lingüista español Agustín García Calvo (Zamora, 1926), enemigo del franquismo y eterno rebelde antisistema, falleció ayer a los 86 años a causa de una insuficiencia cardiaca en su ciudad natal de Zamora, en el oeste de España, según informaron los medios españoles.
García Calvo, quien también destacó como ensayista, traductor y dramaturgo, era considerado por la intelectualidad ibérica como uno de los grandes latinistas y gramáticos españoles del siglo XX. El intelectual y ‘enfant terrible’ de la cultura española fue distinguido en su vida con tres premios nacionales: los de Ensayo (1990), Literatura Dramática (1999) y Traducción (2006).
En 1965 fue despojado de su cátedra en la Universidad Complutense de Madrid por apoyar las protestas estudiantiles contra la dictadura del general Francisco Franco y cuatro años después marchó al exilio en Francia. Regresó a España en 1976, después de la muerte de Franco, un año antes. Como inconformista consecuente, García Calvo apoyó el movimiento de los ‘indignados’, surgido el 15 de mayo del año pasado en la céntrica plaza madrileña Puerta del Sol.
García Calvo es autor de obras como la trilogía ‘Del Lenguaje’ y libros de poesía como ‘Sermón del ser y no ser’ (1972), ‘Canciones y soliloquios’ (1976) y ‘Ramo de romances y baladas’ (1992). Entre sus obras narrativas destacan títulos como ‘¿Qué coños?, cinco cuentos y una charla’ (1990) y ‘Entre sus faldas. Tres cuentos y veintiséis mensajes electrónicos’ (2000). También escribió el Himno de la Comunidad de Madrid.