La luna llena de julio de 2014 será 14% más grande y 30% más brillante que la de otros meses. Foto: wikicommons
La aparición de las ‘superlunas’ se relaciona directamente con el incremento de desastre naturales como terremotos, erupciones volcánicas, entre otros debido a la mayor fuerza gravitacional de la Luna. Pero no existen antecedentes científicos que validen estos fenómenos naturales con las actividades lunares.
Sin embargo, durante el perigeo se desarrollan las llamadas “mareas del perigeo”, mareas más altas de lo normal, es decir variaciones a nivel de centímetros. Este hecho, según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés), no debe generar preocupación alguna.
La Luna llena ocurre una vez al mes y efectivamente afecta las mareas de los océanos, ya que durante una Luna llena, el Sol y la Luna se encuentran alineados y la atracción gravitacional de ambos se suma.
Además, durante la Edad Media se aseguraba que en la fase se la luna llena las personas podían enloquecer debido a los haces lunares que el satélite dirigía hacia la Tierra.
La palabra “lunático” viene del latín ‘lunaticus’ y se relaciona a las fases de la Luna, sin embargo un estudio realizado en 1985 no encontró vínculos entre la enfermedad mental y las fases de la Luna.