Cerro Candelaria y Río Zúñag, nuevas áreas protegidas en Ecuador

Bianca Dager, ministra del Ambiente (s), presidió el acto de incorporación de las nuevas áreas al Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP). Foto: Ministerio del Ambiente
3 456,5 hectáreas de bosque montano y otros ecosistemas se sumaron al Sistema Nacional de Áreas Protegidas – Subsistema Privado, a través de la declaración oficial de dos nuevas áreas protegidas privadas: Cerro Candelaria y Río Zúñag, ubicadas en la provincia de Tungurahua.
Estos dos nuevos espacios de conservación fueron liderados por Fundación EcoMinga. Desde 2019 esta organización coordina acciones con la ONG WWF Ecuador, “para asegurar una armonía entre las comunidades que habitan en el corredor ecológico existente entre los Parques Nacionales Llanganates y Sangay, y su entorno”, informó el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica.
La declaratoria se realizó en el marco de la conmemoración del Día Mundial del Ambiente, (que se celebrará el próximo 5 de junio). El evento fue liderado por la ministra (S) Bianca Dager, en Baños de Agua Santa. En esta actividad también se presentó una nueva especie de rana que habita en los bosques húmedos de estas áreas protegidas, normalmente al interior de bromelias y cuyo nombre se oficializará próximamente.
“La transición ecológica también implica la generación de ciencia. Gracias al trabajo articulado entre el Instituto Nacional de Biodiversidad, Fundación EcoMinga y otros científicos, hoy podemos celebrar que Ecuador tiene una nueva especie de anfibio”, señaló Dager.
70 áreas protegidas a escala nacional
La funcionaria indicó también que “nos sentimos orgullosos de contar ya con 70 áreas protegidas en nuestro Sistema Nacional, con las que seguiremos protegiendo, descubriendo más biodiversidad y caminando hacia la transición ecológica del Ecuador. Esta es la mejor manera que tenemos para celebrar un año más el Día Mundial del Ambiente”.
Por su parte, Tarsicio Granizo, director de WWF-Ecuador, resaltó que “los corredores de conservación son un mecanismo para garantizar la conectividad de los ecosistemas. Esto es que las especies puedan tener pasos o puentes entre áreas protegidas núcleos, para evitar el efecto isla de áreas rodeadas por actividades humanas y así permitir un adecuado ordenamiento de las mismas”.
Granizo destacó que la incorporación de estas áreas privadas al SNAP “es un paso importante para la constitución oficial del Corredor Llanganates-Sangay”.