“Tengo la impresión que mi pecho estalla, que me voy a asfixiar”: apenas recuperada de la covid-19, a Fatima Jaffer le cuesta volver a respirar en Vancouver, en el oeste de Canadá, invadida por el humo generado por los gigantescos incendios que devastan a Estados Unidos.
Canadá ganó los Juegos Olímpicos de invierno de Vancouver, un logro que apenas una semana atrás pocos creían posible. Cuando restaban por disputarse dos finales ayer, las cuales se disputaban al cierre de esta edición, el equipo local tiene ya 14 medallas de oro e iguala el récord histórico de la Unión Soviética en Innsbruck 1976 y Noruega en Salt Lake City 2002. Los canadienses son ya el anfitrión más exitoso en la historia de los Juegos gracias a los tres oros conquistados en la noche del sábado, que hicieron insuficientes el de Alemania y el de EE.UU. Es la primera vez que Canadá gana una cita invernal. La mejor marca en el medallero de Canadá habían sido siete oros en 2002 y 2006, y diez en la edición de verano de Los Ángeles.Los canadienses tenían como objetivo llegar a las 35 medallas tras haber puesto en marcha el programa ‘Own the Podium’ (Conquistar el Podio), el cual, promediando los Juegos, cuando los éxitos no llegaban, recibió fuertes críticas. Estados Unidos también logró
Si Canadá gana el oro hoy ante EE.UU., en el torneo olímpico de hockey sobre hielo, de los Juegos de Vancouver, será probablemente el triunfo más anticipado y exigido que nunca haya conseguido un equipo en cualquier deporte. La audiencia prevista en Canadá para este “superdominio”, como han bautizado los aficionados al punto de ebullición de los Juegos de Vancouver, se prevé que sea de unos 12 millones, un tercio de su población. El número no es imposible, teniendo en cuenta que 4 millones de canadienses siguieron en diciembre el nombramiento de los 23 jugadores. Es el partido de los partidos, la “tormenta perfecta”, el choque más significativo disputado nunca en Canadá, donde el hockey es el indiscutible deporte-religión nacional.Ese deporte es el único que une a este vasto país con dos idiomas, seis husos horarios, casi 10 millones de kilómetros cuadrados de superficie y 35 millones de habitantes. Es como una final del Mundial de Fútbol entre Argentina y Brasil, en el Monumental de R
Le dicen el ‘tomate volador’, pero instantes antes de capturar la gloria, Shaun White parece algo bastante más serio. Parece un mesías. Eleva los brazos lentamente y así, también, el griterío de 4 400 ‘fieles’ que lo esperan al final de un largo y helado tubo blanco. Un minuto más tarde, su larga cabellera rojiza está frente a ellos, y el oro capturado empequeñece ante una certeza: ese extraño personaje es la cara visible de una revolución en el deporte. “Shaun nos está llevando a otra dimensión”, dice a DPA el finlandés Markus Malin, finalista en el half-pipe en la noche del miércoles. Su compatriota Peetu Piiroinen se llevó la medalla de plata y otro estadounidense, Scott Lago, el bronce. Todo un mérito para los finlandeses el llegar tan lejos: a di-ferencia de White, al que su patrocinador Red Bull le construyó un canal propio para su uso exclusivo, en Finlandia no existe una sola pista de halfpipe. “Quizás nos construyan uno ahora”, ríe Malin. Quizás tenga razón y Finlandia no igno
Con el inicio del torneo de hockey sobre hielo, hoy, comienza la locura en Vancouver, el espectáculo más esperado en el país anfitrión de los Juegos Olímpicos de invierno y cuna del deporte.Pese a que la llama olímpica arde desde el viernes, para muchos canadienses los verdaderos Juegos empiezan hoy.“Será una vivencia única”, dijo el capitán de Canadá, Scott Niedermayer, para cuyo equipo solo valen las medallas de oro.Sobre los hombros de los canadienses pesan las esperanzas de 34 millones de compatriotas.“Este torneo es de gran importancia para nosotros. Estamos aquí para ganar”, subrayó el entrenador Steve Yserman, que sin embargo prefiere desprenderse de la presión de ser favorito. “Rusia tiene un enorme poder ofensivo. Son el equipo máximo favorito”, dijo el técnico.Pero el delantero Jerome Iginla no admite excusas. “Los rusos están sometidos a la misma gran presión que nosotros. También quieren el oro y estoy seguro de que en Rusia los aficionados seguirán con atención los partido
El estadounidense Apolo Ohno entró ayer en la historia de los Juegos Olímpicos de invierno al convertirse en el primer hombre que gana seis medallas en el shorttrack.De esta forma, igualó a su compatriota Bonnie Blair, que logró las mismas medallas entre las mujeres. “Me siento muy emocionado por este logro. Lo estaba buscando desde hace mucho y finalmente pudo conseguirlo”, declaró el estadounidense tras el final de la competencia.Campeón de los 1 500 metros en los Juegos de Salt Lake City 2002, el estadounidense esta vez solo pudo ganar la plata, porque el oro fue a manos del surcoreano Lee Jung-Su, que continuó la increíble serie de su país en la especialidad. Lee ganó con un tiempo de 2:17,611 minutos la decimoctava medalla surcoreana en el shorttrack, en una carrera seguida por 13 000 extasiados espectadores. El bronce fue para otro estadounidense, JR Celski, de 18 años, que al igual que Ohno -campeón en los 500 metros de Turín 2006- se aprovechó del error del surcoreano Lee Ho-Su
Con un alucinante espec-táculo que combinó fantasía, tecnología de punta y buena música, Vancouver concretó un sueño de cuatro años y miles de millones de dólares al dejar inaugurados los XXI Juegos Olímpicos de Invierno.La cita deportiva cuatrienal se puso en marcha oficialmente con las palabras de apertura de la gobernadora general de Canadá, Michaëlle Jean, descendiente de inmigrantes haitianos radicados en Columbia Británica.“Declaro abiertos los Juegos de Vancouver, que celebra los XXI Juegos Olímpicos de Invierno”, dijo Jean a una multitud de 60 000 entusiasmadas personas en el BC Stadium de Vancouver.Poco después, el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI) , Jacques Rogge, rindió tributo al esfuerzo de los canadienses para organizar los Juegos y recordó a todos los atletas su responsabilidad de servir como modelos de conducta. Los Juegos reúnen, hasta el 28 de febrero, a 2 762 deportistas (1 660 hombres y 1 102 mujeres) de 82 países, que competirán por los 86 juegos d
Los Juegos Olímpicos de Invierno de Vancouver 2010 quedaron marcados por la tragedia, tras la muerte de un deportista el día de la ceremonia inaugural. El georgiano Nodar Kumaritashvili murió luego de sufrir un grave accidente en el canal de luge, en Whistler, sumiendo en la tristeza a toda Canadá y al mundo del deporte olímpico. “Perdió la vida persiguiendo su pasión. No tengo palabras para decir lo que siento”, dijo el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Jacques Rogge. El máximo responsable del olimpismo dijo haberse comunicado con el Comité Olímpico de Georgia, la familia del deportista y el presidente georgiano Mijail Saakashvili, quien estuvo en la inauguración de los Juegos. Kumaritashvili, de 21 años, perdió el control de su trineo en una curva poco antes de la meta y chocó contra la pared y con una estructura lateral de acero que sujeta el techo del tobogán. El georgiano se golpeó la espalda y la nuca contra la pared del canal. Poco antes de perder el control, s