Todo iba bien en el trabajo de Ricardo Paredes hasta que llegó la pandemia. Pasó de ser botones a trabajar como chofer en un hotel cinco estrellas de Quito. Su labor era llevar al personal a sus casas durante las restricciones de movilidad.
Los asaltos, robos y microtráfico preocupan a los moradores y dueños de negocios de La Mariscal, un barrio turístico del norte de Quito en donde hay decenas de restaurantes, hostales, bares, discotecas y agencias de viajes.
Playas desiertas, hoteles de montaña vacíos, comercios cerrados: el nuevo coronavirus golpeó duramente el turismo centroamericano en plena temporada alta, hundiendo a empresas del sector en la incertidumbre de no saber si podrán seguir operando cuando pase la pandemia.
El paisaje cambió al igual que la dinámica y la cotidianidad. Tras la llegada del aeropuerto Mariscal Sucre a Tababela, el número de hoteles y hostales de tres parroquias cercanas se multiplicó por cinco.
Amalie Gudum y Thilde Ellemose, dos turistas de Dinamarca, visitaron Quito la semana pasada. Ellas son oriundas del puerto de Aalborg e hicieron un recorrido por el Mercado Central, compartieron con los vecinos de La Tola y se hospedaron en un hostal de las calles Pedro Fermín Cevallos y Olmedo, frente al coliseo Julio César Hidalgo.
Desde la terraza del Hotel Juan Carlos, en el malecón de Pedernales, Carlos Ramón Alcívar vio como se desplomó Mr. John, un hotel aledaño con personas en su interior. ¿A qué hora cae este?, pensó.
El tercer día de protestas de las trabajadoras sexuales en Quito tuvo un giro inesperado. No solo se escucharon gritos y se exhibieron pancartas. Este miércoles 21 de octubre de 2015, una manifestante tuvo una relación en el espacio público. Lo hizo a las 11:00 en las inmediaciones de las calles Manabí y Vargas, cerca de la Plaza del Teatro.
Los cabecillas de la red internacional de trata de personas desarticulada hoy, jueves 16 de abril, en Ecuador usaban locales de shawarmas y restaurantes de Quito. Así lo estableció un seguimiento de Inteligencia, que se inició hace dos años a escala internacional.