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Los mitos suelen ser los causantes de que los dueños desistan de esterilizar a sus mascotas. Unas de las creencias más comunes es que los perros y gatos se engordan después de la cirugía. Esto es cierto y probablemente sea la única desventaja. El sobrepeso se produce, por una parte, porque los animales sufren una alteración hormonal, pero se suma también el hecho de que las mascotas tienden a ser más sedentarias. Sin embargo, este inconveniente se lo soluciona con la alimentación.
Durante todo este mes, las brigadas de veterinarios acudirán a los barrios de la Administración Zonal Quitumbe, en el sur.
La casa comunal del barrio Azaya en la ciudad de Ibarra, en el norte de Ecuador, fue temporalmente una sala para esterilizar animales este sábado 29 de marzo del 2014.
Cuatro barrios del sur de Quito y una parroquia rural, Lloa, son parte del proyecto de esterilización de mascotas. Hasta el domingo se realizará esta actividad, previa coordinación con los dirigentes comunitarios.
Las brigadas que realizan la esterilización gratuita de mascotas trabajarán la semana del 10 al 14 de marzo en los barrios Solanda 1, 2 y 4; El Carmen y La Isla 1, pertenecientes a la Administración Zonal Eloy Alfaro, en el sur de Quito, según información de la página web Noticias Quito.
El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables de Perú exhortó hoy, 29 de enero, al Ministerio Público y al poder Judicial a garantizar el debido proceso de las mujeres que denunciaron haber sido esterilizadas forzosamente durante el Gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000).
Pablo N., un peruano al que conozco bien, acomoda la leña de la chimenea; hace frío en Cuenca. Mientras lo hace relata su historia de amor con Pilar, de Iquitos, en las selvas amazónicas. ¿Le quisiste? Le pregunto. "Mucho, pero no pudimos tener hijos", responde. Durante 5 años acudieron a un médico privado en Trujillo; siempre con la esperanza de que vendría el esperado niño. Lo que no les dijo el médico del lugar al que cancelaron USD 5 000,oo fue que nunca podría concebir. La noticia llegó de una enfermera allegada a Pablo y su mujer. Entre los años de 1994 y 1998 se realizó una campaña para supuestamente combatir el tétanos. Era en realidad la de "planificación familiar". Se obligaba a mujeres pobres y analfabetas de entre 18 y 25 años, a acudir a los subcentros de salud; si no lo hacían los "vacunadores" les obligaban a ir al centro donde les harían la ligadura de trompas. No había quién se librara, comenta Pablo. Cuando supimos era muy tarde, la enfermera amiga conoció que se trat