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El próximo sábado 27 de septiembre a las 08:00 se realizará una caminata ecológica hacia El Panecillo, en el centro Histórico de Quito. El punto de encuentro será la entrada principal del Parque urbano Cumandá a la altura de la parada del Trole, en la calle Maldonado.
Un pesebre navideño, considerado el más grande de Sudamérica con figuras de hasta 40 metros de altura e iluminadas por 400 000 luces LED, corona el cerro de El Panecillo, de 3 000 metros de altitud y domina el centro histórico de Quito. En el tradicional pesebre, que ocupa unos 3 500 metros cuadrados, aparecen representados la virgen María, San José, el niño Jesús, los tres reyes magos, la estrella de Navidad, un burro y un buey, que se pueden divisar desde varios km de distancia. Las enormes figuras metálicas están decoradas con 10 000 metros de manguera luminosa que las rodean de pies a cabeza, formando las coronas de los reyes, los destellos blancos de la estrella, la aureola sobre la cabeza de San José y la cuna amarilla de Jesús. En una fría pero despejada noche, Marcelo Andrade acudió con su hija Carola, de seis años, a quien le contó la historia de cada una de las nueve figuras del pesebre. La niña quedó encantada con la imponente estatua de la virgen con alas, que mira hacia el
Desde este año, no se permitirán las ventas informales en la cima de El Panecillo, mientras esté el pesebre gigante, considerado el más grande de Sudamérica.
Pasadas las 17:00, el incendio forestal en El Panecillo ya fue controlado. También ya se permite el acceso de personas y vehículos hacia el mirador. Los bomberos lograron sofocar el fuego ayudados de dos tanqueros. A las 15:00 se iniciaron las llamas, las cuales afectaron a la parte este y llegaron hasta el mirador donde está La Virgen. Hay casas y animales cerca del lugar. Por ello, el Cuerpo de Bomberos restringió el paso a los peatones y conductores.
Policías motorizados y patrulleros subían y bajaban por El Panecillo, en el centro de Quito, ayer. Los controles continuaron tras el operativo antidrogas del viernes, en que miembros de la Policía Nacional y de las FF.AA., destruyeron 20 quioscos de metal y de madera por supuestamente no contar con los permisos municipales. Esta fue la segunda intervención armada, desde el 12 de marzo, cuando fueron desarticuladas dos organizaciones familiares que se dedicaban a la extorsión, usura y asociación ilícita. Al mediodía del sábado, algunos agentes permanecían junto a vendedores desalojados que retornaron al lugar, con maderas y plásticos, para intentar rearmar sus puestos de ventas.
Los perros llegaron en una camioneta de la Policía. Eran dos y fueron llevados para que rastrearan 20 quioscos de metal y de madera, que ayer fueron destruidos en el Panecillo, un barrio céntrico de Quito, en donde el pasado 12 de marzo fueron arrestadas dos mafias dedicadas a la extorsión, usura y asociación ilícita.
Quito, la ciudad de las mil caras, tiene en su centro una pequeña elevación de 3 000 metros de altura que fácilmente se la aprecia desde todos sus ángulos, donde convergen las miradas de sus habitantes. Nada mejor para que en este sitio plasmado por la naturaleza se aproveche y se represente a todas las regiones y provincias del país. Primero compensando a quienes viven en él con otras propiedades como se ha hecho con las familias afectadas por las zonas de alto riesgo. Al tener despejada toda la montaña débese llenarla con las plantas y árboles endémicos de cada provincia, tal vez salpicada con muestras de su fauna hechas en piedra por hábiles artesanos que tan conocidos son en el mundo entero.
Tras un año de interrupción, el pesebre gigante, símbolo de la festividad navideña, retorna a la cima de El Panecillo. Mañana a las 19:00 se encenderán las 6 500 luces que lo iluminarán. El belén, de unos 30 m de altura, está conformado por San José, la Virgen de El Panecillo y el Divino Niño, que está en su cuna.
Mirar a Quito desde el Panecillo es un placer. Es el punto donde se une el sur con el centro de la ciudad. Desde este mirador, ubicado a los 3 000 metros sobre el nivel del mar, se pueden apreciar las cúpulas de las iglesias, la arquitectura colonial del Centro Histórico y los tejados de las edificaciones.