Cinco trabajadores médicos están separados de sus cargos y son investigados por la Fiscalía General de Coahuila, en México, por enviar a un bebé prematuro a la morgue, pese a que el infante tenía signos vitales.
Un bebé prematuro que pesó 268 gramos al nacer salió del hospital con buena salud y pesando más de tres kilos tras permanecer cinco meses en terapia intensiva, anunció este miércoles el hospital de clínicas Keio de Tokio.