Parece que una especie de coronavirus hubiese afectado, desde hace algunos años, a las empresas públicas y, por lo pronto, serán enajenadas ocho de ellas, las que constituyen mayor carga económica para el Estado. El Presidente de la República dispuso el 21 del presente mes, mediante decreto, la liquidación de Tame y la eliminación de Correos, Ferrocarriles, Medios Públicos, Unidad de Almacenamiento, Siembra (ex Yachay), Ecuador Estratégico y Centro de Alto Rendimiento, que tienen un total de 3.695 empleados.
Otras empresas e instituciones serán fusionadas o incorporadas a los ministerios correspondientes, ante la situación crítica que atraviesa el país, derivada de la pandemia que azota al Mundo. Se aspira a que estos ajustes permitan un ahorro de USD 4 000 millones.
La Empresa de Correos es la más antigua del Ecuador. Fue fundada el 2 de mayo de 1831 por el general Juan José Flores, primer presidente de la República y desde entonces ha operado en forma ininterrumpida. Su labor es indispensable y la intención de los gobernantes, según informaron, es compartirla con una empresa privada con experiencia en ese campo, que garantice su eficiente funcionamiento.
El Ferrocarril que conecta a Quito y Guayaquil es una de las obras emblemáticas y ocupa sitio destacado en la historia del Ecuador; brindó valioso aporte para el desarrollo del país. Su construcción inició el presidente Gabriel García Moreno en 1872 y puso en servicio el primer tramo hasta Milagro, pero poco tiempo después fue asesinado. Eloy Alfaro dio decisivo impulso a la obra hasta que llegó la primera locomotora a vapor a Quito, el 25 de junio de 1908. Ahora se considera la posibilidad de adjudicar la empresa, bajo el sistema de concesión, a una firma especializada.
Otra de las empresas públicas importantes que están en situación in extremis es Tame, fundada el 17 de diciembre de 1962 por iniciativa del coronel Luis Ortega Jaramillo, con la finalidad de incorporar a ciudades y pueblos que carecían del servicio aéreo, labor que se cumplió en sus inicios. En ese entonces era Comandante de la institución el coronel Guillermo Freile y Presidente de la República el doctor Carlos Julio Arosemena. Poco a poco creció la empresa, modernizó su equipo, incursionó en el campo internacional y en el 2011 pasó a depender del Gobierno. Actualmente registra una pérdida de 400 millones de dólares.
También se pondrá a la venta la empresa de medios públicos, a la que se asignan USD 700 000 mensuales para su funcionamiento. El baluarte es El Telégrafo, decano de la prensa nacional, fundado por Juan Murillo Miró en 1884 y transformado en “medio público”, en octubre del 2016. Completan la lista de estos medios: Diario El Tiempo (Cuenca), Ecuador TV, Radio Pública y EditoraGran. La intención es que queden un diario impreso, un canal de TV y una radio “al servicio del Estado…”