Pandemia, economía y debate racial en elecciones

Nunca se suspendieron las elecciones en Estados Unidos. Ni la guerra civil ni la incursión en guerras mundiales detuvieron una tradición electoral con sus particularidades.

La actual crisis mundial que agudizó la aparición de la pandemia cambió el estilo de vida de millones de seres en todo el planeta. Norteamérica no fue la excepción.

Los primeros temas polémicos por el manejo de la situación del coronavirus trajeron consigo la actitud negacionista del Presidente. Los impactos fueron rotundos y ahora son uno de los ejes de esta campaña.

Solo se conoce a nivel de los grandes medios de comunicación los nombres de los candidatos de las dos grandes fuerzas mayoritarias: los partidos Republicano y Demócrata.

Las fuerzas minoritarias que siempre existen y que presentan candidaturas ni siquiera se dan a conocer.

Otro tema que siempre sale a relucir es el sistema de elecciones indirectas. Eso explica que muchas veces quien ha ganado los votos populares no gana la elección.

Una vieja tradición desde los primeros tiempos de la independencia, un sistema de representación de electores por estado. El ganador se lleva todos los votos electorales, el perdedor en cada estado no tiene representación minoritaria. Así funciona.
Se llega a la Casa Blanca con al menos 270 votos electorales.

Por ahora las encuestas dan ventajas en el voto popular al candidato demócrata Joe Biden. Hay algunos estados clave -que suelen ser el fiel de la balanza- aún en disputa.

Pero la ausencia de Donald Trump por su contagio cambió la suerte de un segundo debate presidencial que debía llevarse a cabo esta semana.

El primer encuentro fue terrible, de una agresividad nunca vista y muy criticado. El debate vicepresidencial tuvo sus bemoles pero fue aceptable.

La campaña tiene como telón de fondo millones de desempleados, la pandemia y una reaparición de los debates raciales luego de la muerte de personas negras a manos de la Policía. Un nuevo episodio de un tema que se pensaba superado. Tal las cosas en la recta final de la campaña.