Poco después de finalizada la I Guerra Mundial, su madre fue violada por un grupo de soldados rusos en un devastado pueblo rural de Ucrania. Como consecuencia de la brutal agresión contrajo sífilis que, en las primeras décadas del siglo XX, era difícil de curar. Una de las creencias en la aldea campesina decía que, a falta de penicilina, la enfermedad se podía aliviar con el nacimiento de un hijo. En esas circunstancias nació Clarice Lispector (1920-1977), considerada como una de las más grandes escritoras brasileñas.
Ese episodio fue recopilado en la biografía del historiador Benjamín Moser (Houston 1976), y la vida y la obra de Clarice fueron el insumo para la escritora Carla Guelfenbein (Santiago 1959), ganadora del último Premio Alfaguara por su novela de suspense literario ‘Contigo en la distancia’. En una entrevista en EL COMERCIO, la escritora chilena aclara que su novela, que relata la atormentada vida de la escritora Vera Sigall, está basada en la experiencia de Clarice Lispector. La familia de Lispector, como también la de Guelfenbein, huyó de la persecución contra los judíos en Ucrania por los mismos años.
Según la investigación de Moser, que duró más de cuatro años, la violación de su madre durante los pogromos que apagaron la vida de centenares de miles de judíos es uno de los episodios más impactantes en la vida y en la obra de la enigmática Lispector, autora de ‘La pasión según G.H.’ y que, como expresó alguna vez, “yo escribo sin la esperanza de cambiar nada”. Moser, en una entrevista a la revista cultural Ñ, del diario Clarín, explica que la historia de Lispector se remonta a una época de humillación, en la cual las más victimizadas fueron las mujeres. “Entre las víctimas estuvo la señora Lispector, una mujer que con su salud destruida y ya casi paralítica, consiguió llevar a su familia hasta el lejano Brasil, donde su hija menor la vio morir durante los primeros nueve años de su vida”.
La novela de Guelfenbein adapta lo más sustancial del personaje. La escritora Vera Sigall rodó las escaleras de su casa en un barrio de Santiago, pero surge la duda si cayó accidentalmente o la empujaron.
Clarice Lispector, en la vida real, sufrió graves quemaduras después de quedarse dormida en su cama con un cigarrillo encendido. Las dos escritoras tienen en común una vida sin limitaciones económicas. Vera se casó con un poderoso hombre de negocios 20 años mayor que ella, en tanto que Clarice se unió a un diplomático y por eso vivió muchos años fuera de Brasil.
Así resumió su vida Clarice Lispector: “Nací en Ucrania, pero ya en fuga. Mis padres pararon en una aldea que ni aparece en el mapa para que yo naciera y se vinieron al Brasil, adonde llegué con dos meses. De manera que llamarme extranjera es una tontería. Soy más brasileña que rusa, evidentemente”.