El abuso a un perro de tres años indigna y entristece a Quito. Su nombre es Teddy; tiene el pelito color miel y un cuerpo muy lastimado.
Sus ojitos dan cuenta del horror que ha vivido; nadie sabe desde cuándo. Lo único que se conoce hasta el momento es que fue víctima de abuso sexual, según dos reportes médicos, socializados por la Fundación Lucky. “Hay un desgarro anal”, dice uno de los médicos.
Más noticias:
Así encontraron al perrito abusado
El pequeño Teddy estaba colgado de unos alambres de púas en la quebrada Arrayán, en Chillogallo; nadie sabe cuánto tiempo permaneció ahí.
Katynka, rescatista voluntaria, cuenta que el fin de semana recibieron un pedido de rescate. “Intentamos comunicarnos lo más pronto posible, pero nadie contestaba las llamadas”. Tanto insistir, sucedió el milagro.
Los rescatistas tomaron todos los datos y fueron en busca del perrito; después de visitar a dos especialistas, finalmente internaron a Teddy.
Teddy tiene pronóstico reservado
Tras sacarlo de la quebrada, sin fuerzas en sus patitas, Teddy fue sometido a una cirugía de corrección. Según los médicos, el perrito necesita seguir hospitalizado durante al menos 15 días. Katynka contó que se trata de una cirugía compleja que podría infectarse con las defecaciones.
En caso de que eso suceda, Teddy tendría que someterse a un nuevo procedimiento. Para ponerse al día con la veterinaria La Perla, Fundación Lucky hace un llamado a la ciudadanía. Hasta el momento, la cuenta alcanza los 1 200 dólares.
Indignación en redes sociales por perrito abusado
Decenas de personas mostraron su indignación en redes sociales; ahora esperan que las autoridades sancionen al infractor.
Esa aberración está tipificada como una Infracción Muy Grave en la Ordenanza Metropolitana. La persona que provoque intencionalmente daño o sufrimiento a los animales será sancionada con 10 remuneraciones básicas unificadas.