Derechos Humanos

COLUMNAS DE OPINIÓN. Artículos de derechos humanos publicados originalmente en la página de opinión de la edición impresa de Diario EL COMERCIO.

Dimitri Barreto P.

Periodista desde 1996. Ha cubierto los efectos del conflicto armado colombiano, la corrupción y la violencia en Ecuador. Licenciado en Comunicación, con un diplomado en la UNAM sobre cobertura del crimen organizado. Macroeditor de EL COMERCIO. @ECdimitri

¿Hasta cuándo el ‘exceso’ policial?

Los mensajes de los generales no borran la violencia de los agentes del Estado. Patear la cabeza de un hombre reducido en el piso en Guayaquil o arrojar gas y escudos antimotines a médicos que marchan con mandiles y de forma pacífica en Quito para pedir sus asignaciones en la pandemia del covid-19 solo resquebrajan la confianza en la Policía.

Septiembre 14. El Comandante de Policía de Guayaquil ha reconocido públicamente un “exceso” de los uniformados por patear hasta dejar inconsciente a un hombre y por abrir fuego en la calle, cuando no había una amenaza real a su vida. ¿Que esa madrugada del domingo 13 una turba golpeó primero a policías, que hubo daño a la propiedad? Las imágenes muestran el “exceso” policial cuando los agentes habían tomado control.

Septiembre 15. El Comandante de Policía de Quito ha ofrecido disculpas a los médicos por el “exceso” de agentes antimotines. ¿Que no había autorización para ingresar a la Plaza Grande? No es pretexto -incluso si hubiese estado de excepción- para atacar una marcha pacífica, menos de quienes están en primera línea salvando vidas.

¿Generales autocríticos? Los casos son indefendibles; captados en video, difundidos por chats y redes sociales; sin espacio para excusas. Pero los mensajes de los generales son una señal. ¿Excusas? Hace no mucho la tortura a un detenido era justificada porque de por medio estaba la esposa de un uniformado; una “ejecución extrajudicial” en la cabeza de un manifestante era minimizada a la categoría de “uso desproporcionado de la fuerza”.

Señores, un policía es un profesional de la seguridad, recibe entrenamiento del Estado para brindar protección a los ciudadanos en escenarios extremos. Lo menos que se espera de sus comandantes no es que admitan sino que no toleren los excesos, con estrategias. De la autoridad civil, en tanto, se echan de menos políticas públicas, que regule el uso progresivo de la fuerza, que no permita la impunidad. ¿Impunidad? ¿Dónde están, por ejemplo, las investigaciones por las víctimas del paro de octubre?