La viruela del mono se volvió una preocupación mundial. Las alertas se encendieron luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la emergencia de salud internacional debido a una nueva variante y al aumento de los casos.
En Ecuador, en redes sociales se difundió que, supuestamente, una persona portaba la enfermedad, en Guayaquil. Sin embargo, el pasado domingo, 18 de agosto de 2024, las fuentes del Ministerio de Salud Pública descartaron la veracidad de la imagen que circulaba.
El 19 de agosto, en cambio, la institución publicó un comunicado en el que se informó que, en este 2024, se registraron cinco casos de la viruela del mono de cepas anteriores y no de la nueva variante.
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La viruela del mono y los antecedentes
La viruela símica o del mono es una enfermedad causada por un virus de ADN, del mismo grupo de la humana. La relacionada con las personas fue erradicada en 1980.
El Ministerio de Salud informó sobre la adquisición de un lote de vacunas que será destinado a grupos de riesgo. La entidad llamó a la comunidad a, en caso de presentar síntomas, acudir inmediatamente al centro de salud más cercano.
Según la institución, no se puede hablar de un tratamiento definido para la viruela del mono. Los síntomas son similares a los de la viruela humana. A partir del sexto día, suelen aparecer ampollas en la piel.
La fiebre, el dolor de garganta y de cabeza están entre los indicadores. Otro signo es el malestar en la espalda y ganglios inflamados.
La transmisión de la viruela del mono
El epidemiólogo Pablo Espinosa detalló que el periodo de incubación del virus es de 5 a 21 días, contados después del contacto con fluidos de una persona infectada. La fase de mayor contagio se da entre los días 6 y 19 de la enfermedad.
El virus se transmite por contacto con fluidos de personas infectadas: contacto directo con las lesiones cutáneas, saliva, mordeduras de animales infectados, relaciones sexuales sin protección y besos.
Se suma el tocar objetos contaminados, como sábanas o ropa, de personas infectadas con el virus.
La detección de la enfermedad
El epidemiólogo Pablo Espinosa explicó que el proceso de diagnóstico de la viruela símica no es sencillo. Esto debido a la similitud con otras infecciones, como la varicela, el sarampión, cutáneas bacterianas, entre otras.
Los pacientes, incluso, pueden presentar otras infecciones de transmisión sexual. En el caso de los niños puede tratarse de varicela y no de viruela. Las pruebas de laboratorio son la vía para el diagnóstico.
La detección puede ser a través de una prueba PCR, utilizando muestras de las lesiones cutáneas o sangre periférica del paciente.
Las pruebas de anticuerpos no se recomiendan. La limitante es que no garantizan la diferenciación entre distintos virus. Es decir, hay una alta probabilidad de falsos positivos.
El Ministerio de Salud confirmó que cuentan con pruebas para el diagnóstico. Las personas deben acudir a los centros de salud para la evaluación y, de ser el caso, son derivadas a hospitales de segundo y tercer nivel para el test.