Los estrategas mediáticos gubernamentales están rompiéndose la cabeza inútilmente en busca de redondear su proyecto sensacionalista.
He aquí ocho consejos para que el diario público popular (PP) salga de manera inmediata:
1. Definan la línea sensacionalista y mientan en función de sus objetivos (?). Exageren la obra pública del Gobierno, reiteren que es la mayor gestión de la historia, pongan en grandes titulares las frases célebres del Presidente y sobredimensionen los defectos de los enemigos del Régimen.
2. Pongan en la portada chicas sexis y semidesnudas, precisamente lo que tanto criticaban el Presidente de la República y las asambleístas feministas revolucionarias antes de que a los estrategas de Carondelet se les ocurriera que un PP era la única fórmula para recuperar la popularidad y frenar el inatajable descenso en las encuestas.
3. Manejen en las portadas temas de fútbol mezclados con cuestiones íntimas de los jugadores, técnicos y dirigentes. Usen lugares comunes y despliéguenlos en enormes caracteres: “Barcelona mandó al infierno a la Católica” o “Futbolista se divorcia por lío de faldas”. Pruébenlo. Es fácil escandalizar así.
4. Presten mucha atención a los temas de farándula. Ningún lector popular quedará indiferente ante la dramática historia de la conductora que va por su quinta liposucción o el romance secreto del presentador que parecía el padre de familia ideal.
5. Frivolicen todos los temas que los otros periódicos presentan de manera formal, compleja o densa. Por ejemplo, dediquen una doble página a la historia del oscuro líder político que se hizo cirugía plástica de la nariz y no traten de discernir el porqué su partido no logra consolidar una estrategia para hacer una oposición democrática y propositiva (qué aburrido, ¿no?).
6. Publiquen todos los días noticias de crónica roja. Destaquen con fotografías de impacto los hechos de sangre (como dicen en el noticiero de uno de los canales incautados, hoy “públicos”). No hay táctica más eficaz que la de gritar los crímenes para que la sociedad se atemorice, como suelen decir los expertos en terror mediático.
7. Si cuentan con todo el apoyo financiero de la cúpula del poder, háganlo ya. Recuerden que en la prensa sensacionalista nunca falla la fórmula triple S: sexo, sudor y sangre.Y si a eso le añaden pimienta política, tal como hacen en sus cadenas nacionales, no será difícil. Es muy importante atacar y ridiculizar a los rivales con caricaturas, chismes, rumores y fotografías manipuladas.
8. Si no están seguros cómo hacerlo, consulten el manual de Vladimiro Montesinos, quien durante los 10 años del gobierno de Fujimori en Perú manejó periódicos públicos (El Chino, El Bocón y otros). Su estrategia populista era perfecta: ganar el apoyo de “las masas” y quedarse en el poder para siempre.