Un Tribunal de la Corte Provincial dio luz verde al Consejo de la Judicatura para iniciar un sumario disciplinario contra el juez de Portoviejo, Banny Molina.
Este magistrado otorgó un hábeas corpus al exvicepresidente Jorge Glas, Daniel Salcedo y otra persona más. Además, emitió boletas de excarcelación y dispuso la inmediata libertad de los sentenciados.
El pasado 26 de agosto, los jueces provinciales declararon que Molina cometió un error inexcusable al otorgar esa acción constitucional a Glas y las otras dos personas.
“Se dispone notificar a la Dirección Provincial del Consejo de la Judicatura de Portoviejo con la presente declaratoria jurisdiccional previa de error inexcusable, adjuntando copias certificadas del expediente, con el fin de que inicie el correspondiente sumario administrativo”, indicaron los jueces de la Corte de Manabí.
Esa declaración jurisdiccional previa es un requisito para que la Judicatura pueda iniciar un proceso disciplinario. El error inexcusable es una infracción gravísima. Según el artículo 109 del Código de la Función Judicial se sanciona con la destitución.
La infracción disciplinaria
El Tribunal de la Corte de Manabí declaró que el juez Molina cometió un error inexcusable al haber tramitado los hábeas corpus sin tener competencia territorial, pues ese magistrado trabajaba en Portoviejo, mientras que Glas, Salcedo y la tercera persona se encuentran recluidos en una cárcel de Quito.
La segunda razón es que Molina “causó indefensión” al no citar a la Procuraduría y al Servicio Nacional de Atención Integral a Privados de la Libertad (SNAI) a la audiencia donde se otorgaron los habeas corpus.
Situación judicial
Los jueces provinciales de Manabí también dispusieron que la Fiscalía investigue las actuaciones de los funcionarios judiciales que intervinieron en este caso.
Además, la Judicatura presentó una denuncia penal contra el juez Molina por el delito de usurpación y simulación de funciones. Según esa entidad, el magistrado otorgó los hábeas corpus a pesar de estar suspendido de funciones. La Fiscalía inició una investigación previa.
Este magistrado también tiene otro proceso penal en su contra. Está llamado a juicio por presunto prevaricato. Por esa causa fue detenido y ahora cumple arresto domiciliario y uso de grillete electrónico.
Ese presunto ilícito se habría perpetrado en diciembre de 2018. Según Fiscalía, “el juez habría ordenado que una persona sentenciada a dos años por peculado cumpla la totalidad de su pena privativa de libertad en su domicilio (arresto domiciliario), sin que se cumplan las condiciones necesarias para otorgar ese beneficio”.
Postura del juez
El magistrado Molina señaló que concedió los habeas corpus el 5 de agosto de este año cuando aún tenía todas sus competencias vigentes. Dijo que cuando él otorgó esas acciones constitucionales a Glas y a las otras dos personas, aún no había sido notificado sobre su suspensión. Aseguró que esa notificación llegó a su correo el 10 de agosto del 2022
“Actué en plena competencia y jurisdicción en dicho habeas corpus”, indicó durante una comparecencia en la Comisión de Participación de la Asamblea. Además dijo que las boletas de excarcelación sí eran válidaz, legales y que él mismo las firmó. En cambio, el SNAI dijo que halló inconsistencias en esos documentos y por eso no autorizó la salida del exvicepresidente de la Cárcel 4 de Quito.