Imagen referencial. El hueco fiscal o déficit del Gobierno fue de USD 6 472 millones este 2020. Foto: archivo/ EL COMERCIO
En el 2020 la Caja Fiscal recibió USD 7 888 millones menos de ingresos con relación a lo que se había estimado en el presupuesto cuando comenzó el año, antes de la pandemia.
Y aunque el Gobierno recortó en USD 4 815 millones los gastos en relación a lo inicialmente planificado, en 2020 los egresos fueron más altos que los ingresos y el hueco fiscal o déficit fue de USD 6 472 millones; casi el doble de lo estimado antes de la pandemia.
Jaime Carrera, secretario del Observatorio de la Política Fiscal, explica que el presupuesto comenzó sobreestimado, porque el Gobierno incluyó un monto por concesión de activos que nunca se concretó.
Además, considera que los ingresos esperados por venta de crudo también estaban sobreestimados antes de que se desplomen los precios por la pandemia.
En el 2020 los ingresos por venta de petróleo registraron el monto más bajo de la década. El Fisco recibió solo una cuarta parte de lo que recibió en el 2019 por este rubro.
Este efecto se sintió en todos los países cuyos ingresos dependen de las exportaciones petroleras. Pero Ecuador se afectó además porque en abril se rompieron el Sistema de Oleoducto Transecuatoriano y el Oleoducto de Crudos Pesados, lo cual suspendió temporalmente los envíos.
En lo tributario, abril y mayo fueron meses con mayor caída de recaudación frente a los mismos meses del 2019, por las restricciones que golpearon a las actividades económicas.
En el segundo semestre las cifras mensuales tuvieron caídas menos fuertes. Según el Servicio de Rentas Internas, las arcas fiscales recibieron un 13,6% menos por impuestos en el 2020 frente al 2019. Ese nivel bajo de recaudación no se había visto desde 2016.
Jorge Calderón, analista económico, recuerda que en 2016, año de recesión, se subió temporalmente el IVA a 14%.
Calderón cree que el siguiente Gobierno tendrá poco espacio para bajar gastos, por lo que deberá buscar vías creativas para subir ingresos sin alzar el IVA para no impactar el consumo en los hogares.
Los atrasos se controlaron
Por la caída de ingresos, el Fisco incurrió en mayores atrasos durante el primer semestre del año con proveedores, funcionarios públicos, seguridad social y Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD).
Desde abril, los funcionarios recibían sus sueldos con semanas de retraso y los proveedores, que ya protestaban desde el 2019 por las persistentes facturas pendientes, registraron más montos vencidos por cobrar.
Los valores pendientes llegaron a sumar USD 3 656 millones en septiembre pasado.
El flujo de la caja mejoró cuando el Gobierno concretó un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En octubre llegaron los primeros USD 2 000 millones de ese ente y los atrasos bajaron a USD 1 614 millones. Y en diciembre llegó un segundo desembolso de USD 2 000 millones del Fondo.
El Gobierno canceló una parte de las obligaciones pendientes en efectivo y otra, con bonos. El 2020 finalizó con atrasos de USD 1 264 millones, similar al 2019.
El Fisco aún adeuda a GAD y proveedores.
705 millones menos en salarios
El Gobierno recortó uno de los gastos corrientes más pesados para el presupuesto, el de salarios públicos.
El monto se redujo en USD 705 millones frente al 2019. Es el segundo año que el Ejecutivo alcanza una reducción en pago de nómina.
Otro gasto que mermó en el 2020 fue el de intereses de la deuda. Con la renegociación de los bonos que se concretó en agosto pasado, el Fisco pospuso el pago de alrededor de USD 1 000 millones en intereses de esos papeles y acordó pagarlos desde el 2026 hasta el 2030.
Según el Observatorio de la Política Fiscal, los egresos de inversión, también conocidos como gastos de capital, se redujeron el año pasado. Esto se dio, principalmente, porque el Gobierno central recortó las asignaciones para los gobiernos seccionales en alrededor de un 23%.
La obra del Gobierno central también tuvo recortes. En el 2020 se estimó destinar USD 714 millones a obra pública, pero solo se gastaron USD 207 millones.
En el 2021, el Presupuesto partirá estimando gastos totales de USD 27 204 millones.
El endeudamiento se incrementó
Antes de la pandemia, el Fisco calculó las necesidades de financiamiento en el 2020 en USD 8 933 millones, pero luego se dispararon.
El Gobierno consiguió 11 149 millones, principalmente de multilaterales. Solo el Fondo Monetario desembolsó USD 4 643 millones en 2020, como parte de un crédito de emergencia y del programa alcanzado en octubre pasado. Una de las principales metas que el país tuvo que cumplir fue la aprobación de la Ley anticorrupción.
Las arcas fiscales, además, recibieron recursos de otros organismos como el Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y CAF que dieron préstamos de emergencia. Los multilaterales entregaron el 65% de todo el financiamiento logrado el año pasado. Y se colocaron USD 3 000 millones en bonos internos, casi 1 000 millones más que en el 2019.
En noviembre pasado, la deuda pública representó 62% del PIB. El reto de los siguientes gobiernos es bajarla al 40% del PIB hasta el 2032, de acuerdo con lo dispuesto en la Ley de Ordenamiento de las Finanzas Públicas.