A las 12:00 del pasado jueves, Mercy Escalada salía por la puerta de arribos nacionales del Aeropuerto Mariscal Sucre, en el norte. En sus manos tenía un par de carteras y mientras caminaba, hablaba por teléfono celular. Ella comentó que no toma ninguna medida de seguridad en particular cada vez que llega a la terminal aérea.
Sin embargo, evita abordar cualquier taxi de las cooperativas que operan en el sector. Ella prefiere comunicarse con algún amigo o familiar para que la recoja. “También procuro viajar con poco equipaje, para no tener problemas”.
Ese día, el tránsito peatonal y vehicular fue intenso en el acceso al área de arribos nacionales. La mayoría de pasajeros salía del andén con sus celulares en una mano y su equipaje en la otra.
César Posso, gerente de la Empresa Metropolitana de Servicios Aeroportuarios, explicó que la poca precaución que tienen los usuarios del aeropuerto con sus pertenencias es una de las principales causas de robo. No precisó cifras.
En la Unidad de Vigilancia del Aeropuerto trabajan 24 policías. El mayor Édgar Logroño, jefe de la unidad, afirmó que en el sector el delito más común es el robo. Explicó que los delincuentes tienen dos formas de actuar.Unos merodean el sector e ingresan al aeropuerto aparentando ser pasajeros. Ellos aprovechan la distracción de los usuarios para robar las maletas en la sala de espera, cafeterías o mientras pagan el taxi o algún otro servicio. “Ellos se filtran en las aglomeraciones”.
Otros, generalmente, operan fuera de las instalaciones. Su principal objetivo son los celulares, computadoras portátiles y maletas pequeñas que arranchan de las manos de sus víctimas y huyen.
En el último mes, se han registrado 16 delitos dentro y fuera del aeropuerto. 12 de ellos son por asalto y hurto a personas, vehículos y locales comerciales. Según las estadísticas de la Policía Judicial, más de la mitad de delitos fueron cometidos entre jueves y viernes. 13 de las 16 víctimas fueron hombres. Dos fueron extranjeros.
Gonzalo Lagla, usuario del aeropuerto, está consciente del riesgo, pero prefiere caminar un par de cuadras con sus maletas en la mano para tomar un taxi. “Los taxistas del aeropuerto cobran demasiado por el servicio”.
Él dijo que la seguridad dentro del aeropuerto es buena. La Dirección de Seguridad la terminal aérea coordina las operaciones con las policías Nacional y Metropolitana. En el servicio de seguridad del aeropuerto trabajan 300 personas.
Los horarios de mayor conflicto son entre las 07:00 y las 09:30 y entre las 17:00 y 20:00. Por las instalaciones del aeropuerto se movilizan cerca de 5 millones de personas al año.
Lagla aseguró que hay más riesgos en la calle. Según datos de la Policía, solo dos de los 16 delitos se cometieron en el interior de la terminal aérea.
Por la zona de acceso vehicular circulaban decenas de taxis, muchos de los cuales portaban placas particulares y no tenían los permisos de operación municipal. En la acera y en baja voz, otros conductores ofrecían servicio de taxi ejecutivo a los pasajeros que salían de la terminal.
Posso explicó que la seguridad es una responsabilidad compartida entre Corpaq, Policía Metropolitana, aerolíneas y las diferentes unidades de la Policía Nacional, cada una con su propia competencia y jurisdicción.
En migración, por ejemplo, trabajan 97 policías. Ellos se encargan de la revisión de documentos y del historial policial. También verifican si el pasajero tiene alguna orden de aprehensión o arraigo.
En el aeropuerto hay seis detectores de metal y nueve escáneres de rayos X para evitar el ingreso de materiales peligrosos y prohibidos.