Redacción Cultura
El proyecto de la nueva Ley de Cultura, que fue entregado a la Asamblea el viernes último, trae inquietud.
Se deben incluir las aspiraciones de los trabajadores del arte
Byron Paredes
Representante de la DanzaByron Paredes, representante del sector de la Danza, que participó en los congresos convocados por el Ministerio de Cultura, se llevó una sorpresa al ver el texto en la web de esta institución.
“Es una ley excluyente y es preferencial para la gente que se dedica a hacer cine y audiovisuales. El resto, que trabajamos en la gestión cultural, una vez más, ha sido segregado”, dijo el artista.
Él sostiene que en el proyecto no se tomaron en cuenta los puntos de vista planteados en las reuniones.
“Una de las aspiraciones fundamentales que podíamos conseguir con la nueva Ley era la seguridad social. El artista en el país no tiene afiliación al IESS. En el proyecto se contempla que los artistas deben ser empleados del Gobierno o funcionarios públicos para acceder a una seguridad social”, manifestó Paredes.
Mario Oñate, del sector de la pintura, que también fue a las reuniones, añadió que esa fue una de las preocupaciones que se resaltaron en los encuentros.
En los últimos tres meses se desarrollaron nueve asambleas regionales y cinco congresos, uno por cada sector (de cine, teatro, danza, música, literatura), además, la última que fue en Montecristi, el 18 de julio pasado.
Los artistas “no tenemos seguridad social, no somos sujetos de crédito en ninguna institución financiera. Nos colocan fuera de la sociedad. Vivimos en la informalidad”, comentó Oñate. También -subrayó- somos creadores de identidades.
Además, según Paredes, tampoco se acogió un pedido unánime sobre la profesionalización, acreditación y reconocimiento de la trayectoria de los artistas. Hasta el cierre de esta edición (15:00), los representantes de otras áreas no revisaban el proyecto.
“Es cierto que se nos ha tomado en cuenta para participar, pero lo que hemos dicho no se ha considerado. Se deben incluir las aspiraciones de los trabajadores de las artes en todas sus expresiones”, afirmó Paredes.