En los comicios generales que se llevarán a cabo el 17 de febrero, los votantes también elegirán a los cinco delegados del Ecuador, y sus respectivos suplentes, ante el Parlamento Andino para el período 2013-2017.
En la carrera por las cinco curules tercian 45 aspirantes titulares, repartidos en nueve listas nacionales. Ellos reemplazarán a los salientes representantes Raúl Patiño y Cecilia Castro, de Alianza País, Valeska Saab (PSC), Fausto Lupera (Sociedad Patriótica) y Patricio Zambrano (Partido Socialista).
El primero de ellos, hermano del canciller ecuatoriano Ricardo Patiño, ocupa en la actualidad una de las cuatro vicepresidencias. Mientras que Lupera, del partido de Lucio Gutiérrez, es el único del grupo que busca la reelección.
La selección de los cinco parlamentarios andinos dentro del proceso electoral en el Ecuador, plantea la pregunta: ¿Qué relevancia regional tiene el organismo legislativo cuya sede se halla en Bogotá? Jorge Gaitán Villegas aseguró a este Diario que, en realidad, el Parlamento Andino no tiene ninguna trascendencia.
El analista colombiano en temas internacionales y editor adjunto del portal de la privada Fundación Razón Pública, una institución dedicada al análisis de temas locales, nacionales y mundiales, se mostró enfático en su respuesta. “El Parlamento Andino fue creado como una especie de copia del Parlamento Europeo. Y lo que ha sucedido es que ahora resulta completamente irrelevante”.
Adicionalmente, consideró que la falta de trascendencia que acusa el órgano legislativo andino es consecuencia del desbarajuste de la integración regional que vive la Comunidad Andina. “Ahora es parte de las instituciones que han perdido su razón de ser”. Y se mostró más tajante al asegurar que “francamente, no sucedería nada si, hipotéticamente, el Parlamento Andino dejara de funcionar”.
En la misma línea, Mauricio Jaramillo Jassir, catedrático e investigador de la privada Universidad del Rosario de Bogotá, anotó que como resultado de las fisuras en la integración andina, “el Parlamento está condenado a la intrascendencia”. Igualmente, anotó que el deterioro de la integración se agudizó con la salida de Venezuela del bloque de la Comunidad Andina de (CAN), en el 2006.
Jaramillo Jassir, no obstante, consideró que debiera ser pertinente una reingeniería del organismo, creado el 25 de octubre de 1979, para volverlo más trascendente. ¿Cómo? “Para salir de la invisibilidad en la que se encuentra, se debería esperar la adopción de una serie de normas comunitarias, como lo hace el Parlamento Europeo, sobre los grandes temas, como las migraciones, la ampliación, la crisis económica…”.
Precisamente, en una corta entrevista que diera a este Diario, el presidente del organismo, el parlamentario colombiano Héctor Helí Rojas Jiménez, dijo que es imprescindible “promover el ideal de la integración regional”.
Además, en una suerte de balance preliminar de las actividades de la entidad que dirige en el 2012, aseguró que lo más destacado había sido la aprobación de la nueva Carta Social Andina. Este documento salió a la luz en julio pasado y fue resultado del trabajo de 230 actores sociales que reflexionaron sobre temas comunes como atención a la niñez, salud, personas con discapacidad, migraciones, vivienda, trabajo, economía solidaria.
Parte de la escasa influencia que tiene este organismo, se debe a que sus atribuciones no tienen un carácter mandatario. Su rol, más bien, obedece a acompañar “el proceso de integración subregional andino”, examinando las decisiones que toman sus países y formulando recomendaciones.
Mientras en el Ecuador continúa la carrera por las cinco curules, totalmente opacada por lo que son las elecciones presidenciales y de asambleístas, en estos días hay escasa actividad en el edificio de ladrillo visto que el Parlamento Andino ocupa, en el número 70A-61 de la Carrera 14, en el centrooriente de Bogotá.
El viernes último, por ejemplo, en la sede no se encontraban Rojas Jiménez ni el secretario general, el ecuatoriano Rubén Vélez Núñez.
Giovanna Román, coordinadora de Comunicaciones y de Prensa de la entidad, informó que las sesiones ordinarias se reanudarán a finales de marzo, tras el receso iniciado en diciembre pasado.
El Pleno de esta instancia está integrado por 20 parlamentarios, cuatro por cada país miembro . Es decir, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia. A ellos se agregarán cuatro representantes de Chile, que es miembro asociado.
El período ordinario, que incluye reuniones a finales de cada mes, seguirá en abril, mayo, junio y julio. En este último, se designará al nuevo presidente del organismo, que sustituirá a Rojas Jiménez. El ciclo de sesiones continuará en agosto, septiembre, octubre y noviembre.
¿Qué piensa la gente común en torno a esta instancia legislativa? La bogotana Carolina Rubia, que labora como secretaria de la Academia de Lenguas Kiron, situada en el edifico contiguo a la sede del Parlamento Andino, dijo desconocer a qué se dedican los representantes de los cinco países. Y José Hernando Talero, guardia de seguridad, de ese inmueble dijo: “La verdad, no sé qué hacen. Solo sé que ahora están de vacaciones”.
Otros aspectos
Si bien el Parlamento Andino funciona desde 1979, sus miembros se eligen por voto popular desde hace una década, aproximadamente.
La primera elección en Ecuador se produjo en el 2002, donde el PSC, el Prian y Pachakutik lideraron las preferencias electorales.
Las últimas elecciones fueron en el 2009, donde Alianza País, con el 46% de los votos alcanzo tres curules (una de ellas en alianza con el socialismo). Sociedad Patriótica y el PSC se adjudicaron un curul cada uno.
En esta ocasión se reedita el acuerdo entre Alianza País y el socialismo, para impulsar a Pedro de la Cruz y Silvia Salgado.
Otros parlamentarios en los últimos años fueron Ivonne Baki, Marcelo Dotti, Wilson Sánchez, Freddy Ehlers, Wilma Salgado…
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