La reforma electoral que prohíbe a los medios publicar reportajes que “incidan a favor o en contra de un candidato” es una medida sin precedentes en América Latina.
La regulación -impulsada por el presidente Rafael Correa- ubica a Ecuador como el único país de la región que ‘amordaza’ a la prensa en una campaña electoral.
A excepción de Cuba, en la región no hay normas que dificulten la tarea periodística libre, por el riesgo de que la autoridad electoral considere que un dato ayude o perjudique a un postulante.
En los vecinos Colombia y Perú, la prensa tiene la libertad de realizar sus coberturas, cuyo contenido puede resultar incómodo para alguna de las candidaturas.
En el 2010, los colombianos acudieron a las urnas, con Juan Manuel Santos y Antanas Mockus como los candidatos finalistas.
En ese marco, los medios informaron que el consultor venezolano ‘J J’ Rendón, reconocido por orquestar “campañas sucias”, asesoraba a la candidatura de Santos.
En cambio, en el caso de Mockus, los medios revelaron que el ex Alcalde de Bogotá padecía de párkinson, un elemento que pudo influir en el electorado.
“En Colombia a nadie se le ocurriría prohibir que la prensa cumpla su deber durante la campaña. La Constitución garantiza la libertad de informar y ser informado”, señala Cristian Torres, periodista de la cadena radial Caracol.
En Perú tampoco hay prohibiciones legales para que en época electoral los medios no puedan informar u opinar sobre los postulantes. De hecho, pese a que la mayoría de la prensa apoyaba a Keiko Fujimori, Ollanta Humala, ahora presidente, venció.
Para José Hernández, subdirector de diario Expreso, la regulación a los medios es un golpe a la sociedad. A su juicio, la enmienda inaugura la era de una ciudadanía “infantilizada y tutelada” por el poder político. “Esta prohibición está queriendo afirmar que sin la supuesta protección del Presidente, los ciudadanos serían manipulados por los medios. Qué idea tan pobre tiene el Presidente de la ciudadanía!”. Dice que en el país se impondrá una “autocensura” del periodismo.
En el Cono Sur, en Argentina, Uruguay, Chile y Brasil, no existe ley alguna que delimite el trabajo de los periodistas para las coberturas de los procesos electorales.
Aunque en esa parte del hemisferio hay el debate sobre las tendencias políticas que pudieran tener los medios, en ninguno se equipara la cobertura electoral con la campaña electoral.
Diarios como El País de Uruguay o El Mercurio de Chile, teóricamente opositores de los gobiernos de José Mujica y de la otrora gobernante Concertación chilena, gozaban de libertad para la producción de sus contenidos.
En el caso de Argentina el tema va más allá. En una fuerte confrontación entre medios opositores, oficialistas y el Gobierno, desde el poder no se ha pensado en poner una traba al oficio periodístico en época electoral. Aunque las armas gubernamentales puedan ser al ahogamiento económico a los medios, los contenidos son aceptados y discutidos.
En Venezuela, donde la tensión entre el gobierno de Hugo Chávez y la prensa es permanente, tampoco hay normas que pongan cortapisas a la prensa durante los días de campaña electoral.
En septiembre del 2010, cuando se celebraron las elecciones legislativas, los medios publicaron trabajos periodísticos sobre los postulantes y sus propuestas.
En México, el periodismo también puede cumplir con libertad su tarea en los procesos electorales. El periodista David Santacruz señala que la única regulación señala que los partidos no pueden contratar directamente espacios publicitarios en los medios. De ahí que los periodistas pueden realizar su trabajo sin trabas.
Solo en Bolivia se presentó una restricción similar a la de Ecuador. Fue en las elecciones de magistrados, en octubre del 2011. Solo para ese proceso electoral, la Asamblea controlada por el partido de Evo Morales prohibió que se entrevistase a los postulantes. También impidió a la prensa que se refiriera de forma “positiva o negativa” sobre los postulantes.
“Esa prohibición fue para esa elección de jueces, pero no para los comicios regulares. Es lamentable lo que pasa en Ecuador, pues en la práctica significa terminar con la libertad de expresión”, sostiene Pedro Glasinovic, subdirector del diario La Patria.
¿Fin a las sabatinas?
En su enlace del último sábado, el presidente Rafael Correa señaló que si entra en vigencia la reforma electoral también se pondría freno a sus enlaces sabatinos.
“Esto me pone restricciones muy fuertes a mí mismo. Significa que no se pueden hacer reportajes especiales sobre mi Gobierno, significa que no puedo hacer la sabatina”, dijo Correa, según por el periódico El Ciudadano.
Durante los cinco procesos electorales que se han realizado desde 2007, Correa no frenó sus enlaces sabatinos en época de campaña.
Según el Presidente, la prohibición busca evitar que los medios se conviertan en “actores políticos”.
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