Emilio Palacio, editor de Opinión de El Universo, dijo que se ratifica en cada palabra de su artículo y que la única responsabilidad que tiene es decir la verdad
¿Usted cree que se le pasó la mano en sus críticas con el Gobierno?
No creo que tenga que ser yo quien deba juzgarlo, soy un ser humano y me puedo equivocar. No creo que sea eso lo que está en discusión, sino el principio de la libertad de expresión en la que tengo derecho a equivocarme, no creo haberlo hecho en este artículo. Me ratifico en cada palabra. Otros opinarán diferente, es legítimo discutir. Lo que no es legítimo es que me tenga que ir a la cárcel en el supuesto caso de que me haya equivocado.
¿Por qué?La cárcel por delitos de imprenta está derogado en todos los países democráticos del mundo. La Comisión Interamericana de los Derechos Humanos dice que eso no puede haber, que es una barbaridad inconcebible en un país democrático. El Gobierno se comprometió ante esa comisión a hacer los trámites para derogar esa figura y la de desacato…
¿Y qué ha pasado?
Nada, es más están usando esa figura para enjuiciar y demandar a periodistas y medios.
¿Cuál es el delito del que lo acusa el Presidente?
No he terminado de leer las 151 páginas, acabo de regresar al país. Hasta ahora lo que plantea es una demanda por injuria calumniosa, es decir por haberlo acusado de haber cometido un delito. Dice que además hay la injuria no calumniosa, la ofensa. Es un cambio en relación a la estrategia del juicio de Camilo Samán, que juntaron dos demandas y eso no está permitido en los delitos de imprenta. Ahora dice, también me ha insultado pero me limito a injuria calumniosa.
¿Y usted no cree que es una injuria calumniosa? llamarlo “Dictador” y decir que podría ser llevado “ante una corte penal por haber ordenado fuego a discreción y sin previo aviso contra un hospital lleno de civiles…”, como escribió en su artículo ‘No más mentiras’ (6 de febrero), y que el Presidente ha citado en algunas entrevistas como una acusación de su parte.En general rehúyo discutir el contenido del artículo cuando hay un juicio de por medio, es un consejo de los abogados. Igual le responderé, ya que no le hice la advertencia de no tocar el tema.
Así es…
Al Presidente le dijeron fascista y se enojó porque lo consideró un insulto, podríamos coincidir que es insulto, pero político. Eso no es un epíteto, es una categoría política consagrada en la sociología y en las ciencias políticas. Injuriar es lo que hace Correa: pitufo, enano, gordita, son atributos físicos. Dictador y fascista no entran en los atributos físicos; puede ser guapo, alto, e igual ser un dictador que es una categoría política.
¿Pero qué implica esa categoría política?
Implica la concentración de los poderes, actuar sin respetar los derechos de las minorías, la libertad de expresión, lo que caracteriza a este Gobierno. Rafael Correa es un dictador, no me puede decir ‘me estás ofendiendo’, es una categoría política.
Pero lo está acusando de no ser democrático y el Presidente lo puede interpretar como una injuria.
Entonces, ¿qué es lo que tenemos que discutir?, si eres alto, feo, bajito. Eso que lo discuta el Presidente, porque él dice majadero y qué tiene que ver eso en la discusión de si hubo o no un golpe de Estado. Si le digo dictador es pertinente al debate, de qué vamos a hablar, si ya no podemos hablar del carácter del Gobierno.
Su postura es militante, ¿cuál es el límite entre lo que escribe en su columna de opinión y su militancia?
A Diario EL COMERCIO le ha preocupado mucho ese tema; lo comprendo, es legítimo, y que tan insistentemente lo traiga a colación. Todos los ciudadanos hacen política, los periodistas y los que escriben editoriales. La pregunta es si lo hacemos con las armas legítimas o estamos haciendo trampa. Escribo artículos de opinión y sería una locura decir que no, los editoriales de EL COMERCIO hacen política todos los días y suben a la tarima. ¿Qué de malo tiene treparse a la tarima cuando se lo hace con decencia? Si quiero ser candidato es otra cosa.
¿Y quiere ser candidato?
Ya me lo dijeron mil veces. Bueno hasta ahora no soy, esperemos hasta cuándo se convenzan quienes están intrigando.
¿Al decir que hace política desde su columna asume que es oposición al Régimen, tal como se cuestiona a algunos medios ?
La oposición en política tiene una característica, busca el poder político. Pero una persona que diga el Gobierno es un desastre y le preguntan ¿qué quieres? y dice quiero regar mis flores, no es oposición. Lo mismo es el periodista, opino que es un dictador, pero no quiero poder político.
¿Cuál es su responsabilidad social al momento de escribir una columna?
Decir la verdad. La única responsabilidad que tiene un periodista es decir la verdad, no está comprometido ni con el pueblo ni con el país, ni con los intereses de nadie. El periodismo solo tiene una patria, una bandera, que es decir la verdad nada más.
¿La verdad es el único parámetro que tiene?
Dígame uno, no se me ocurre, no sé cuál parámetro me haría decir voy a mentir.
Opinar en base a una información que esté sustentada.
Ese es un parámetro mío, como periodista me exijo eso. Si hay otro que no fundamenta su palabra no veo por qué tienen que sancionarlo, es un irresponsable que la gente detectará. La verdad es lo más importante que hay, ¿por qué tengo que sacrificarla? A veces lo hago, porque no me dejan decir lo que quiero.
¿Quiénes?
El Gobierno, las leyes, usted dice algo aquí y lo meten preso por decir dictador; la próxima vez ya no diré dictador sino que al señor Rafael Correa a veces se le va un poquito la mano.
¿Qué reflexión le dejó ‘Camilo el matón’, por ese artículo también tuvo una demanda judicial?
¿Qué haría una persona si en la calle le gritan ‘oye matón’, pediría tres años de cárcel, pediría 2 millones, haría que el Presidente intervenga? Lo que sí estoy seguro que la mayoría de la gente no haría es al final decir te perdono, lo hizo porque estaba perdido. Les ganamos, no yo, la opinión pública. Hubo un segundo intento y no prosperó por la solidaridad ciudadana. Esta es la tercera, si logramos que la ciudadanía se pronuncie volveríamos a ganar. Lo que no entienden algunos es que para defenderse de la cárcel, la democracia y la libertad, no lo puede hacer con un pañuelito. Y el pago que recibimos de algunos colegas es tú quieres subirte a la tarima, en el fondo les sirve para no solidarizarse…
¿A quiénes?
Con los periodistas perseguidos, no quieren solidarizarse.
¿Cree que deben solidarizarse todos los colegas?
Por su supuesto, no conmigo sino con la libertad de expresión. Mis artículos en un periódico que no lee nadie cree que realmente golpean al Gobierno.
Pero el ex presidente Osvaldo Hurtado se sintió ofendido y le envió una carta por otro artículo suyo.
Pero no le pareció desproporcionado, a un ex Presidente de la República le va a hacer algo mi artículo. No toleran la opinión distinta y tienen que mandar una carta mencionando mezquinos intereses, odios, solo tienen que decir no estoy de acuerdo
¿Hay una diferencia ética entre la carta de Hurtado y la demanda de Correa?
Hurtado se caracterizó por mantener un amplio respeto a la libertad de expresión. Si usted escribe un artículo de 520 palabras lo consideran enemigo.
¿Qué hay detrás de la demanda del Gobierno?
Son varias cosas. Tengo una demanda presentada ante la Corte Interamericana de DD.HH., contra el Estado por una sentencia que violó mis derechos humanos. La otra que deroguen el delito de desacato y la prisión en los juicios de imprenta. Si derogan eso a Correa se le acaba el poder para acabar con la prensa. Podrá seguir amenazando a las empresas periodísticas, que necesitan estabilidad económica, pero no a los periodistas, seguiré opinando. Nunca lo he acusado de nada de lo que no tenga convicción y no me he metido en su vida personal, no le he dicho enano, le digo dictador y se enoja.
¿Podría pensarse que ha caído en esa misma arena del Presidente?
Eso dice Rubén Darío Buitrón (Editor de Información de EL COMERCIO) -ojalá que ponga el nombre- que escribió un artículo diciendo que Camilo Samán y Emilio Palacio son lo mismo. Los ciudadanos tendrán que decidir si es lo mismo un tipo que no tiene plata, con una casa hipotecada, que maneja un Spark, que me fui a Miami con mi plata y me quedé endeudado…
¿Y tiene los 80 millones que pide en la demanda?
Por eso demanda a El Universo, porque sí los tiene. Aquí no es solamente un problema político, hay un afán del Presidente de hacer dinero, presenta una demanda a estos jueces a los que hay que meterle la mano y le dan la razón y recibe 80 millones, que según Carlos Marx Carrasco no pagarán impuestos, porque están exentos. Yo no tengo 80 millones, a El Universo les pueden sacar.
¿Esa es la única razón para involucrar a los directivos?
No, ya estamos diciendo meter miedo, crear un sistema totalitario. La otra, el terror a que el fantasma del 30 S se cayó; se inventó un fantasma espectacular, que lo quisieron tumbar.
¿Es obsesión del Presidente hacer creer que el 30S fue un intento de magnicidio?
Lo que está detrás es gravísimo. La gente no se da cuenta lo que pasa en el país, si triunfa este proyecto, la historia va a decir que a inicios del siglo XXI, los carteles internacionales de la droga analizaron que estaban concentrando el poder en Colombia y México, y diera la impresión que la intención es descentralizar… la cocaína ya se fabrica en Ecuador, lo dice la Policía. Y en ese escenario Correa destruye a la Policía con un acto irresponsable, infantil, inmaduro…
En el comunicado de la Aedep menciona que al involucrar a los directivos de El Universo lleva a la práctica la censura previa, ¿por qué?
Eso tiene que preguntarle a la Aedep. Soy un ser humano, me puedo quebrar, tengo una familia y no puedo destruirla por nada, ni por la libertad de expresión. Me saco el sombrero ante los directivos de El Universo, que teniendo mucho más que perder que yo han aguantado de una forma tan valiente y firme, no todos los medios del Ecuador han tenido esa actitud.
¿Entonces ‘habrá una censura previa en los medios?
Los Pérez tendrían que decir, chuta vamos a perder el periódico, ya no se puede criticar al Gobierno. Si algún dueño de medio lo hace, El Universo no lo ha hecho, no voy a decir que es un traidor, hay muchos radiodifusores que se callan porque viven en parte de la publicidad estatal.
¿En otros columnistas puede darse la autocensura?
Sí en todos los medios, periódicos grandes y pequeños.
¿A partir de estas demandas pueden sentir miedo de escribir del Gobierno?
Yo tengo miedo, no sé si mañana me quiebro. Tengo una familia, qué gano yo…
En el juicio de Samán, se retiró del cargo ¿y ahora?
Veremos. Siempre he dicho, una institución no se puede destruir por un ser humano, aquí hay 600 a 800 familias, mi familia no es más. El Universo es una empresa fuerte y tengo la convicción de que vamos a ganar.
¿Cómo está el ambiente, hay preocupación por el futuro de la empresa?
No puedo opinar de lo que opinen los Pérez o El Universo, lo que veo es una actitud comprometida, sincera, transparente. En otras circunstancias no lo diría, pero cuando estamos en medio de una guerra hay que decirlo. Si llegara a darse una situación habrá que sacrificar a Emilio Palacio, son 600 a 800 familias y eso está por encima de esto…