Dos perros de raza pastor belga y un golden retriever se unen a la Unidad Canina de Cruz Roja Pichincha. Esta existe desde hace cinco años con canes que llegan con los voluntarios.
Los dos primeros, una hembra y un macho, serán entrenados en labores de rescate y búsqueda de personas. El tercero ayudará en caninoterapia y acompañamiento para terapias psicosociales.
El entrenamiento durará un año y busca que los canes desarrollen ciertos instintos de manera predominante. Así lo explica Roberto Hinostroza, coordinador de la Unidad.
La preparación de los canes se inicia cuando son cachorros, incluso desde el vientre de la madre, señala Hinostroza. En las diferentes etapas se busca que el perro pierda la sensibilidad a diferentes estímulos y “no tenga miedo”.
La adquisición de los canes se llevó a cabo con la cooperación de la Cruz Roja Alemana. Además, empresas privadas firmaron convenios para la alimentación y atención veterinaria de los canes.
María Dolores Ponce, presidenta de la junta de la Cruz Roja de Pichincha, explicó que los servicios de búsqueda y rescate, y las terapias serán coordinados con los Gobiernos Autónomos Descentralizados cuando lo necesiten. Así la Junta tendrá autonomía para trabajar, destaca.
Ponce cuenta que anteriormente los canes que trabajaban eran entrenados junto a sus cuidadores. Pero una vez que los voluntarios se retiraban el can también lo hacía.
Los perros no han sido bautizados aún. La Cruz Roja impulsa una campaña en redes sociales para que sea la comunidad la encargada de dar nombre a cada uno de los canes.
Desde este 11 hasta el 16 de enero quienes deseen lo podrán hacer. Una vez concluido el tiempo se escogerá a los ganadores y los perros serán nombrados.
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