Alentados por las concesiones recibidas por el liderazgo de su propio partido y el presidente Barack Obama en las discusiones sobre el límite de endeudamiento, legisladores del grupo conservador Tea Party podrían continuar siendo una fuerza clave entre los republicanos y quizás inducir un estancamiento hasta las elecciones del 2012.
Decenas de legisladores del movimiento que aboga por un Gobierno pequeño y una disciplina fiscal conservadora forzaron al presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, a abandonar sus esfuerzos por alcanzar un pacto con Obama porque incluía un aumento de los impuestos.
Y los analistas pronostican que la influencia del movimiento se mantendrá. La lucha por evitar una catastrófica moratoria de pagos terminó el 2 de agosto con un acuerdo para elevar el techo de endeudamiento del país, que fue aprobado por el Congreso y ratificado por Obama.
La discusión sobre el límite de endeudamiento expuso una división fundamental en el partido Republicano entre el recientemente creado Tea Party donde muchos consideraban necesaria una moratoria para poder controlar el gasto del país y tradicionalistas como Boehner que llamaban a un acuerdo para elevar la autoridad de endeudamiento.
Una ola de miembros del Tea Party fueron elegidos para el Congreso en las elecciones de noviembre del 2010, debido al malestar entre los votantes por el mal estado de la economía y el gasto gubernamental. “Esta ola no ha llegado a su apogeo todavía”, dijo Larry Sabato, director del Centro de Política de la Universidad de Virginia.
“El impulso entre los votantes generalmente se basa completamente en recortar gastos. Existe esta fisura dentro del Partido Republicano, entre los absolutistas del Tea Party y los tradicionalistas fuertemente conservadores, pero todos concuerdan en que la deuda debe ser atendida”, dijo.
Sin un ala moderada
Sabato pronosticó un estancamiento y batallas hasta las elecciones presidenciales de noviembre del 2012. “La derecha está energizada. Pueden embestir contra Obama, la salud, el gasto, el desempleo, la deuda. No hay una rama moderada del Partido Republicano. El Partido es muy conservador y está básicamente de acuerdo. Seguirá siendo conservador e intransigente”.
El Tea Party será una fuerza importante durante el próximo año y medio. También previó graves problemas si el movimiento conservador logra ampliar aún más influencia. “Si llegan al poder, si los republicanos ganan la Casa Blanca o controlan la Casa Blanca, el Senado y la Cámara, verán la irrupción de la guerra civil”, dijo Rothenberg.
El Tea Party pensará‘ahora podemos gobernar’. Esperarán que todo lo que desean sea aprobado. Será un gran problema para quienquiera que sea el presidente”, añadió. La ex gobernadora de Alaska y ex candidata vicepresidencial, Sarah Palin, tiene fuerza en esta carrera presidencial.