El primer proyecto minero de mediana escala que entrará en producción en el 2017 será Río Blanco, en la provincia del Azuay. Esto lo dio a conocer la mañana de hoy viernes 1 de julio del 2016 el ministro de Minería, Javier Córdova, durante un conversatorio con medios de comunicación en esa Cartera de Estado.
Río Blanco forma parte del grupo de cinco proyectos de minería a mediana y gran escala que desde hace más de cinco años viene promocionando el Gobierno y está a cargo de la empresa china Junefield.
Los otros cuatro proyectos son Mirador, mina de cobre a cargo de la china Ecuacorriente que comenzará a producir desde el 2018; Fruta del Norte, a cargo de la sueca Lundin que producirá desde el 2020; y los proyectos Loma Larga a cargo de la canadiense INV Metals y Panantza San Carlos, a cargo de Ecuacorriente. Estos dos últimos aún en fase de exploración.
Río Blanco posee una reserva de 0,6 millones de onzas de oro y 4,3 millones de onzas de plata que al precio actual de ambos metales representan unos USD 900 millones.
Este proyecto, al ser de mediana minería, no requiere la firma de un contrato con el Estado para su explotación sino que paga una regalía del 4% sobre las ventas de minerales.
Según Córdova, entre este año y el próximo comenzará la construcción de la mina que demandará de una inversión cercana a USD 79 millones y generará unos 400 empleos.
Esta mina procesará 800 toneladas de roca al día (una cuarta parte de lo que se procesará en Fruta del Norte).
Córdova advirtió que al ser este un yacimiento menos profundo será más fácil su explotación.
También indicó que de las 300 solicitudes recibidas para las nuevas áreas mineras, las primeras serán entregadas en los próximos meses.