Hasta ayer los ganaderos no recibían la notificación del incremento del precio del litro de leche en finca por parte de la industria. Sin embargo, el fin de semana pasado los consumidores de lácteos del país ya sufrieron ajustes de hasta USD 0,10 por litro.
La queja fue presentada ante la subsecretaria de Ganadería, Margoth Hernández, quien ayer se reunió con una veintena de dirigentes del sector, de Sierra y Costa, en Guayaquil. Ella esperará que concluya esta semana para que los USD 0,4 adicionales como base sean desembolsados por los industriales. Sino, mediará para su pago. El acuerdo ministerial 138, de la cartera de Agricultura y Ganadería, fijó un pago mínimo de sustentación de 39,33 centavos de dólar, más lo estipulado en una tabla oficial referencial de pago por componentes e higiene. La norma está vigente desde el 21 de abril pasado. Con dicha tabla, los ganaderos de la Costa pueden recibir hasta 54 centavos por litro, y en la Sierra, el máximo sería de 50 centavos. La diferencia está en que los primeros producen leche con mayor cantidad de sólidos, como grasas y proteínas. “Eso es mejor pagado”, expresó Paul Olsen, presidente de la Asociación de Ganaderos del Litoral. Pero a Mauro Guzmán, productor de Ambato, le preocupa que dentro de las bonificaciones esté contemplado el procesamiento a través del CBT (Control Bacteriano Total). Es un análisis que determina cuántas bacterias tiene una muestra de leche.El CBT reemplaza al examen de reductasa, un análisis que mide la calidad por horas: más de 4 horas a la intemperie sin dañarse es aceptado. Guzmán advirtió que la inocuidad la garantizan las ordeñadoras eléctricas, pero significa una fuerte inversión para los pequeños ganaderos .