La maternidad tiene un impacto significativo en la vida de las mujeres y el ámbito laboral no se queda afuera. Por ello, encontrar un equilibrio entre ser madre y trabajadora es fundamental.
Según un estudio del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), de 2021, la maternidad acentúa las brechas laborales en la región. Por ejemplo, ha llevado a más madres a trabajar a tiempo parcial. Otro dato revela que la llegada del primer hijo genera un efecto en la búsqueda de un autoempleo o un trabajo informal en las mamás. Mientras que en el caso de los padres no es así.
Este mismo estudio encontró que, a mediano plazo, la tasa de autoempleo de las madres permanece entre un 17% y un 42% más alta que antes del nacimiento de sus hijos, mientras que el trabajo informal aumenta entre un 16% y un 50%.
“Estas brechas laborales, sumadas a los retos que las mujeres enfrentamos para combinar las tareas operativas del trabajo y las de mamá, provocan un gran impacto en el trabajo de la mujer. Por tanto en el cumplimiento de sus metas profesionales, inclusive pueden terminan en la auto exclusión del mercado laboral”, señaló Paulina Cobo, Country Head de Cornerstone Ecuador.
Por esta razón, para la ejecutiva es importante que se cultive una cultura empresarial que genere un equilibrio entre la maternidad y el trabajo. Pero, al mismo tiempo que potencien el desarrollo profesional de las madres.
Además, Cobo hace nueve recomendaciones para que tanto mamás y empresas encuentren ese equilibrio.
Para ellas
- Establecer objetivos. Es importante identificar y establecer cuál es la prioridad en ese momento y tomar acción para cumplir con las metas propuestas. Puede que ser madre y profesional sean igual de importantes, por lo que no se trata de sacrificar una de ellas, sino de encontrar la manera de cumplir con las responsabilidades que suponen ambas, respetando los tiempos personales y siendo más eficiente en las horas laborales.
- Crear un horario. Es importante establecer un horario que permita equilibrar las responsabilidades laborales y familiares. Esto significa planificar el tiempo que pasará en el trabajo y el tiempo que se dedicará a la familia.
- Aprender a delegar. Si se tiene un compañero o una pareja, se debe compartir las responsabilidades en casa. Esto significa dividir las tareas de cuidado de los niños, la preparación de alimentos, la limpieza de la casa, etc.
- Es permitido fallar. Es importante comprender que nadie es perfecto y como madres también podemos fallar. Por ello, es fundamental aceptar que la imperfección es parte del proceso y estar cómodas con el hecho de no poder hacerlo todo, dice Cobo.
- Buscar apoyo. Es importante tener amigos y familiares que puedan apoyar en momentos de necesidad. Si se cuenta con amigas que también son madres puede intercambiar consejos. No olvide tomar tiempos libres para usted y hacer cosas que le gusten.
Para las empresas
- Comprender las necesidades de las madres. Para lograr el bienestar de las trabajadoras, es esencial que las organizaciones escuchen sus necesidades, generen confianza y les ayuden a recargar energías y priorizar sus tareas.
- Flexibilidad y equilibrio para todos. Existen roles que deben realizarse desde la empresa, en este caso se recomienda establecer tiempos de inicio y finalización, una programación más flexible y sobre todo comprender cómo equilibrar las prioridades para realizar de la manera más adecuada su trabajo.
- Bienestar emocional. No es suficiente solo establecer medidas de salud física, también es crucial implementar protocolos de salud mental para asegurarse de que las personas se encuentren seguras, saludables y sean productivas.
- Aprendizaje. Hoy en día, habilidades como la comunicación, la adaptabilidad, la integridad, el pensamiento analítico, la resiliencia y la empatía son esenciales. Por lo tanto, es necesario que la formación sea continua y que los líderes fomenten y promuevan el aprendizaje en línea en áreas que sean relevantes para su empresa o entorno.
Cobo agrega que, “las leyes de trabajo deberían estar enfocadas en la protección de los derechos de las mujeres. Si bien, los gobiernos están trabajando para igualar las bajas por maternidad y paternidad, las empresas necesitan reforzar sus medidas de acción con programas más flexibles como una forma de abordar esta problemática”.
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