Biess prevé invertir 1 100 millones en bonos estatales en el 2021

Atención a afiliados en las oficinas del Banco del Afiliado, ubicados en la Plataforma Financiera en Quito. Foto: archivo / EL COMERCIO

Las inversiones del Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess) en el sector público cerrarán este 2020 con un monto equivalente al 2,7% del Producto Interno Bruto (PIB) y superarán con casi USD 1 000 millones lo previsto inicialmente.
El Banco había presupuestado invertir USD 1 700 millones en deuda con el Estado. Sin embargo, la proyección para diciembre es terminar en
2 646 millones, según la proforma presupuestaria de 2021 del Biess.
Para el próximo año, la entidad prevé una asignación menor, esto es, de USD 1 100 millones.
Que el Banco invierta una gran cantidad de recursos este año da cuenta de la alta necesidad de financiamiento que ha tenido el Fisco, presionado por la crisis y la pandemia, frente a lo cual se ha recurrido nuevamente al dinero de los afiliados y pensionistas.
Así lo observan, con preocupación, Fernando Mosquera, extitular de la Comisión de Inversiones del IESS; Víctor Villacrés, exgerente del Biess, y la abogada Patricia Borja, quienes analizaron la proforma de 2021.
Un ejemplo reciente de la crisis de liquidez del Estado es el convenio de pago suscrito en octubre pasado entre el IESS y el Ministerio de Finanzas.
En dicho acuerdo, el Gobierno se comprometió a transferir, en tres cuotas mensuales, USD 1 527 millones en efectivo por el aporte del 40% a las pensiones, que estaba impago desde octubre de 2019, pero el IESS acordó utilizar USD 800 millones para comprar bonos a 5 y 10 años plazo.
Hasta agosto de 2020, el 40% de todo el portafolio de inversiones del Biess se concentraba en el sector público, con USD 8 177 millones, muy por encima de la participación en el sector privado que pesa 2% en el total. El resto está en créditos para los afiliados y jubilados.
Patricia Borja anota que es un riesgo financiero para la entidad, ya que no se diversifican las inversiones que permitan incrementar el patrimonio.
“Es sumamente complicado, porque el Estado ya tiene muchas obligaciones pendientes con el IESS, y la situación económica del Fisco no es la más adecuada”, comentó.
Una cifra que genera alerta en la proforma del próximo año tiene que ver con las transferencias que se harán al IESS. El Banco planea tomar USD 2 155 millones de sus recursos para inyectar liquidez al seguro.
“Se va a desinvertir de los fondos previsionales, para pagar pensiones. Es como cuando una persona tiene más gastos que ingresos y va sacando dinero de su cuenta de ahorros para seguir gastando. Esto se solucionaría si el Estado se pondría al día con sus responsabilidades”, dijo Mosquera.
En el presupuesto para 2020, la expectativa era transferir USD 365 millones al IESS, pero en la práctica las asignaciones hasta agosto sumaron USD 1 097 millones y se prevé cerrar el año con una cantidad más elevada.
El incremento de la demanda de recursos por parte del seguro, para cubrir pensiones –principalmente-, responde a la caída de los ingresos por aportaciones, debido a las desafiliaciones y a la reducción de las remuneraciones de algunos afiliados, señaló Villacrés, quien dijo que el valor proyectado para el 2021 en este rubro se apega a la realidad del país.
“El próximo año se proyecta que continuará la pandemia y, con ella, sus efectos negativos para la economía. Se avizora que todavía habrá complicaciones en el mercado laboral”, precisó el exgerente del Biess.
Por otro lado, los tres expertos cuestionaron que el presupuesto del año siguiente no contemple más dinero para la colocación de hipotecarios y dijeron que la meta de USD 500 millones, inferior a lo estimado para 2020, evidencia que el Banco dará menos énfasis a este segmento.
El Régimen y el IESS han señalado que elaboran un borrador de reforma legal para darle sostenibilidad al sistema. El texto será entregado al siguiente Gobierno para su análisis.
El Biess ofreció dar en los siguientes días una entrevista para analizar la proforma y el plan de inversiones.