El martes 29 de junio del 2021, el Pleno de la Asamblea Nacional aprobó su primera ley en este período legislativo. El Parlamento resolvió allanarse, con 132 votos afirmativos, a 48 observaciones presentadas por el presidente de la República, Guillermo Lasso, al proyecto de Ley de Economía Circular Inclusiva y se ratificó, con 130 votos, en cinco artículos aprobados en segundo y definitivo debate.
Una vez que el Legislativo trató la objeción parcial del Ejecutivo, la norma será publicada en el Registro Oficial, en los próximos días, señaló la Asamblea en un comunicado.
El presidente de la Comisión de Desarrollo Económico y ponente del proyecto, Daniel Noboa (Ecuatoriano Unido), dijo que a través de la revisión, análisis y debate en la mesa se consideró que las propuestas realizadas por el Ejecutivo mejoran el contenido del proyecto y aplicabilidad.
Además, señaló que el Jefe de Estado adecuó el texto para que la norma no solo se enfoque en el reciclaje y la administración de residuos, sino que tenga un enfoque más integral e hizo hincapié en las 9R de la economía circular: repensar, reutilizar, reparar, restaurar, remanufacturar, reducir, reproponer, reciclar y recuperar.
En su intervención también sostuvo que la Comisión apoyó la eliminación del Comité Nacional de Economía Circular, ya que en tiempos de escasez de recursos la eficiencia no se alcanza creando nuevos comités, sino fortaleciendo la institucionalidad existente, lo que resulta contrario a la esencia misma de la legislación de economía circular.
Durante el debate, la asambleísta Wilma Andrade, ID, sostuvo que la economía circular genera nuevos modelos de negocio y generará beneficios como el aumento de competitividad, crecimiento del empleo, aumento del Producto Interno Bruto (PIB), mayor innovación tecnológica, nuevas formas de fidelizar al cliente, mayor rentabilidad de productos y procesos, reducción de generación residuos, reducción de impacto ambiental, entre otros.
Por su parte, el legislador César Rohon, exPSC, sostuvo que la normativa es una alternativa para la sociedad, siendo necesaria la articulación entre las instancias privadas y públicas, como los Gobiernos Autónomos Descentralizados municipales, para contribuir al desarrollo nacional. Además, dijo que se debe construir una cultura del reciclaje.
La asambleísta Diana Pesántez, Creo, señaló que es preciso detener el modelo económico lineal y pasar a la economía circular, con el fin de fortalecer la competitividad. Puntualizó también que la normativa marca una diferencia con visión al futuro, ya que propone un justo equilibrio entre la protección a la naturaleza y el desarrollo del ser humano.
Francisco Jiménez (Creo) expresó que con esta iniciativa se empieza a cambiar la matriz y forma en la que se procesan los desechos. Al mismo tiempo, hizo énfasis en cuatro aspectos de la ley: grado de industrialización, niveles de desarrollo tecnológico, generación de recursos humanos y acceso a financiamiento. Señaló que la norma no solo trae beneficios sociales, sino que permitirá el crecimiento del PIB.