Florencia Kirchner, hija de los expresidentes argentinos Néstor Kirchner y Cristina Fernández, apeló el embargo que la Justicia dispuso sobre USD 5,7 millones de cuentas y cajas de seguridad de su propiedad en una causa que indaga a la empresa familiar Hotesur, informaron el jueves 21 de julio del 2016 fuentes judiciales.
El abogado Carlos Beraldi, que también representa a la expresidenta, presentó hoy un escrito para apelar la decisión que tomó el juez Julián Ercolini la semana pasada tras ordenar la apertura de varias cajas de seguridad que Florencia posee en el Banco Galicia, dijeron las fuentes, según la agencia estatal de noticias Télam.
Florencia Kirchner, de 26 años, guardaba en sus cajas de seguridad USD 4,66 millones, así como 1,03 millones en una cuenta bancaria unos USD 3.621 en otra.
Ercolini investiga presuntas irregularidades en la firma Hotesur, administradora de hoteles, en la que Fernández es accionista.
En un dictamen, la Fiscalía señaló el pasado viernes que la causa busca determinar si los expresidentes y sus hijos Florencia y Máximo resultaron beneficiarios en forma “sistemática y coordinada” de los pagos que los empresarios “favorecidos” por el Estado “habrían realizado a favor de ellos”.
La apelación presentada hoy por Beraldi está basada en dos hechos, según añade Télam, que son por un lado que no pesa sobre Florencia ninguna imputación y que la investigación sobre esas cajas de seguridad puede surgir de un “ilícito”.
La decisión del embargo se produjo luego de que la diputada opositora de centro izquierda Margarita Stolbizer denunció “movimientos extraños” en relación a las cuentas bancarias de la expresidenta y de sus hijos.
Tras esa acusación, la ex jefa de Estado denunció a la legisladora, a su abogada y al juez federal Claudio Bonadio por la supuesta filtración y tergiversación del contenido de un documento que supuestamente fue hallado durante un allanamiento.
Para la exmandataria, la denuncia de Stolbizer se basó en una mala interpretación de la información que fue encontrada en un estudio contable allanado a decisión de Bonadio en el marco de otra causa que la afecta, y que investiga otra de sus empresas, Los Sauces.
En Facebook, el pasado viernes Florencia Kirchner aseguró que el dinero hallado en su caja de seguridad era producto de la herencia de su padre Néstor, fallecido en 2010, y de la cesión de gananciales que efectuó su madre.
“Amaría tener a mi padre y no tener que estar hablándoles hoy de ninguna sucesión. Pero mi realidad es esta”, remarcó.
No obstante, añadió que esos millones de dólares los había “declarado” y denunció la “persecución” política que considera que sufre su familia.