Esmeraldas se ha convertido en una de las zonas más vigiladas por Fuerzas Armadas y Policía. Desde hace ocho días, militares de las tres Fuerzas se han desplegado en esta provincia, que hoy es atacada por una ola de inseguridad y hechos violentos.
Según los reportes oficiales, en esta primera semana se han establecido los puntos calientes o de mayor riesgo. Entre esos sitios está la ciudad de Esmeraldas, sitios turísticos como Atacames y otros sectores fronterizos como Mataje y San Lorenzo.
Equipos de unidades élites del Ejército como los Comandos han sido enviados a estas dos últimas zonas. Allí inspeccionan pasos clandestinos de grupos irregulares que operan en la frontera con Colombia.
La vigilancia se realiza por vía terrestre, al filo del río Mataje. También equipos especializados de la Armada se trasladan constantemente por los brazos de mar y riveras cercanas. Con lanchas patrulleras inspeccionan embarcaciones que cruzan de un país a otro. Especialmente, las barcas que salen con dirección a Tumaco, en Colombia.
Por su parte personal de la FAE también ha sido enviado para cumplir más misiones de reconocimiento de terreno y refugios de bandas delictivas.
En total son más de 2 000 militares que están en todos los puntos de riesgo. Ellos tienen un soporte de más de 800 policías que también refuerzan las operaciones.
Agentes de unidades élites como el GIR, GOE, GOM y UMO llegaron a Esmeraldas. Su permanencia es de forma indefinida. Las autoridades han señalado que continuarán con las acciones de resguardo hasta que los índices delictivos se reduzcan.
Actualmente, Esmeraldas es la segunda provincia con más muertes violentas en el país. Hasta mayo se contabilizaron más de 150 asesinatos. Solo es superada por Guayas que ya se suman más de 570 muertes.