La bufanda y el abrigo de lana se han convertido en prendas infaltables en la cotidianidad de María Grijalva. Ella estudia en una universidad de Santo Domingo de los Tsáchilas. Hasta hace tres meses, no las tenía en su armario, pues estaba acostumbrada al clima cálido y húmedo, propio de esta provincia.
Sin embargo el frío que se ha registrado en pleno verano alteró su forma de vestir. Desde agosto pasado es una constante tener en las mañanas y madrugadas cielo cubierto, viento fuerte y lloviznas.
Cuando debe salir a clases, a las 06:30, casi no puede ver las calles a través de los vidrios de su casa. Una densa neblina cubre el ambiente y el viento la hace tiritar.
Según datos del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), en Santo Domingo las temperaturas también han variado porque en la Cordillera de los Andes se acumuló una masa de aire húmedo. Esto provoca amaneceres con cielos totalmente cubiertos que impiden que ingrese el calor del sol a la ciudad.
En las madrugadas, la temperatura mínima de Santo Domingo varía entre 16 y 21 grados centígrados. Y el clima no mejorará pues ya se viene la época invernal (diciembre a mayo), en donde se incrementarán las lluvias.
Por ello, Juana Araujo compró cobijas y edredones para el cuarto de su hija de 5 años. Ellas viven en el tercer piso de un edificio, en el noreste de Santo Domingo.
“Incluso dormimos con ropa abrigada, que antes no era común usar”, cuenta Araujo. En los hogares de los santodomingueños ya se dejan pijamas bajo las almohadas.
Elvia Camacho, de 72 años, dice que los cambios en el clima han sido paulatinos en los últimos 20 años. Ella llegó a Santo Domingo hace medio siglo. Recuerda que las montañas estaban cubiertas de vegetación. Pero que de a poco se empezaron a cortar los árboles para construir viviendas. “Eso influyó para que el clima cada vez se parezca más al de la Sierra”.
El técnico del Inamhi, Alejandro Terán, dice que sí hay relación entre el clima y los bosques. Esto porque la deforestación es una de las causas para que el clima se modifique. Según él, en los árboles se concentra el calor y la humedad y estos se preservan por días. Eso hace que un sitio permanezca caluroso aunque haya lluvias.
Desde la Prefectura se impulsa un proyecto de reforestación, para mitigar el impacto que ha tenido la tala indiscriminada de árboles. Tienen dos viveros en los que se produce más de un millón de plantas en el año. El prefecto Geovanny Benítez asegura que se busca crear y recuperar espacios verdes de la provincia, pero aún falta que la comunidad se involucre más.
“Desde noviembre empezamos a entrar en la etapa invernal. Por ello hay más precipitaciones y la temperatura varía”, comentó el especialista del Inamhi.
Por ello, para evitar enfermedades, Araujo, por ejemplo, abriga a su hija con un gorro, una bufanda y una chompa para ir hasta la guardería durante las mañanas.
Según la directora de la escuela Gonzalo Rubio, Carmen Bohórquez, en los centros educativos se contraen enfermedades respiratorias con frecuencia y por eso no hay que escatimar los cuidados. “Hay niños que no se abrigan y se resfrían. En el plantel tratamos de abrigarlos, pero muchas veces los niños tienen alergias”.
Tampoco -agrega- se trata de colmarlos de prendas, que los hacen sudar o estar incómodos, pero sí evitar que estén expuestos con tan solo camisetas o pantalones que no tienen tela gruesa.
La fiebre es el primer síntoma de alerta para las madres. Hasta el año anterior, Maritza Chávez compraba medicamentos para que los niveles de temperatura en su hija de 4 años bajaran. Pero este año prefirió llevarla al médico. La pequeña tenía síntomas de gripe.
El especialista en enfermedades respiratorias, Franklin Oviedo, asegura que los cambios repentinos de temperatura ocasionan enfermedades de origen alérgico como sinusitis y rinitis, que se ha vuelto común en Santo Domingo. En su consultorio, por ejemplo, se atendieron 60 pacientes en septiembre y octubre. Antes, en agosto, no llegaba ni a la mitad de los casos.
Según él, las personas confunden la gripe o el resfrío con estas enfermedades y por ello se detectan tardíamente. “La gripe y el resfriado son enfermedades causadas por virus, pero estos son diferentes y actúan de forma distinta en el organismo”. Por ello no deben tratarse igual.
El resfriado es causado por más de 200 virus como el adenovirus, rinovirus, sincicial. Hay virus que afectan la nariz, otros las amígdalas. Por lo general aparece únicamente en época de lluvias y los síntomas son más llevaderos.
La gripe, en cambio, es ocasionada por el virus de la influenza. Los síntomas son más fuertes y se requiere de mayor cuidado. Aunque no es una enfermedad mortal si no se atiende a tiempo puede afectar los bronquios o los pulmones. De ahí que se debe aprender a convivir con el clima y sus variaciones.
El comercio se adelantó
Para los comerciantes de abrigos, la temporada invernal se adelantó. Por ejemplo, desde mediados de septiembre se venden 10 chompas más. En un día los comerciantes venden entre USD 150 y USD 200.
Los productos que tienen más demanda son los guantes, los gorros, los abrigos de diferentes modelos y colores y las bufandas. Otro producto que se empezó a comercializar son las cobijas de lana y las de terciopelo.
16 grados centígrados es la temperatura más baja registrada.