Christian es un youtuber que no sigue la norma general. No sube videos cada tres días, no se pasa pendiente de cuántos seguidores tiene y cómo los aumenta; no se preocupa mayormente de monetizar sus contenidos. A él lo que le interesa es contar el Quito escondido.
Inspirado en documentales como los que veía en National Geographic y en la BBC, hace cuatro años Christian se lanzó a hacer un video sobre lugares abandonados de la capital. Y le gustó.
Ese fue el inicio de lo que se convertiría en un canal de YouTube denominado La Chulla Historia.
“El canal tenía otro nombre, pero cuando empezó a crecer me decidí por Chulla Historia, porque chulla significa impar, simple, y eso trato de hacer: contar de manera sencilla para que todo mundo conozca aspectos sobre la ciudad que van más allá de lo que se enseña”.
Videos sencillos de entender, pero no sencillos de crear. A Christian le lleva a veces un mes de trabajo preparar uno de sus videos, pues busca enfoques distintos e información poco conocida. Y él es el camarógrafo, el guionista, el editor del video, el narrador. Todo.
Cualquiera pensaría que su profesión es la de historiador o la de comunicador social, quizá cineasta. “Nada: soy ingeniero en Hotelería y Turismo”, explica Christian.
Aunque más que eso, este quiteño de 36 años es un apasionado de la historia de la ciudad y del país. Es esa pasión la que le lleva a dedicar los días libres de su trabajo a la preparación de sus videos.
“Soy cliente fijo de la Biblioteca Municipal, de la Aurelio Espinosa Pólit, del Archivo Nacional”, cuenta Christian. “He tenido acceso a archivos particulares, documentos y a historiadores y especialistas que me ayudan con información, documentos, libros en los que baso lo que cuento a la gente”.
Se ha ganado esa confianza y por eso le satisface hechos, como por ejemplo, que de la Academia Nacional de Historia le llamaran para felicitarle.
Cincuenta videos
¿De qué cosas especiales uno puede enterarse en estos videos, que ya suman 50? Por ejemplo, de la historia del Cantuña de carne y hueso; no el de la leyenda, sino del herrero indígena, tan acaudalado que compró una manzana entera y tan importante para el templo de San Francisco que una capilla ahora lleva su nombre.
Que en las batallas de la Independencia hubo las Tres Manueles, tres mujeres lojanas que se vistieron de hombres, y cada una se hizo llamar Manuel, para combatir en los ejércitos de Sucre.
Atravesará las puertas secretas que desde el piso de la iglesia de El Sagrario llevan a antiquísimas criptas.
Sabrá dónde está la sencilla tumba de uno de los ciudadanos quiteños más importantes de la historia: Eugenio Espejo…
Y ahí radica otro de los aportes del canal: mostrar dónde y cómo están hoy los lugares que guardan la historia quiteña y ecuatoriana.
Christian vuelve a decir que no es historiador, pero sí un quiteño que tuvo la suerte de enamorarse de la ciudad y sus secretos desde aquellos días infantiles cuando su abuelo, el toleño Marcelo Nolivos, lo llevaba a caminar por las calles del Centro hasta San Francisco, mientras le contaba historias de ojos de agua, túneles secretos y cuevas olvidadas.
Más noticias relacionadas
Visita nuestros portales: