En esta época, cuando han surgido problemas graves para los médicos ecuatorianos, conviene referirse al progreso nacional en tratamientos del cerebro. Una sinopsis al alcance de la comprensión de todos, está publicado en el Suplemento “La Pandilla”, agregado a la edición de EL COMERCIO de los días sábados. Esta se titula “Cerebro: el amo de tu cuerpo” Agrega: es más rápido y poderoso que cualquier computadora. Desde sus diversas partes -corteza, cerebelo, tronco encefálico, hipocampo, glándula pituitaria y el hipotálamo- mantienen y regulan nuestra vida, ya que inclusive controlan la respiración, la circulación de la sangre y hasta la parte espiritual. Una glándula de tamaño de una arveja, alojada en la parte alta, es la que produce hormonas gracias a las cuales crecemos y permanecemos sanos.
Dos eventos en la Universidad Católica y la Andina Simón Bolívar, nos permiten conocer el estado científico actual del tratamiento y cirugía del cerebro, en nuestro país. El primero, con la presentación del libro Neuroradiología Diagnóstica y Terapéutica de los autores Dr. Reinaldo Páez Z., ecuatoriano; y del mexicano Dr. Bernardo Boleaga. Colaboran 20 neuroradiólogos de Estados Unidos, Canadá, México, Colombia, Chile, Perú y Ecuador. Con la radiología pueden observar ahora hasta los hilos finos del sistema nervioso central y llegar, con la cirugía, al lugar exacto donde hay una alteración provocada por enfermedad.
Con diagnóstico previo, posible con equipos de última generación que sí tenemos, la posibilidad de peligro en las intervenciones quirúrgicas, es menor. Ahora, microcatéteres van por vía vascular, viajan dentro del cerebro y llegan hasta las lesiones a ser eliminadas.
Además del acto en la Universidad Católica, con asistencia de ilustres especialistas desde México hasta Chile, nos ocupamos de la ceremonia en la Universidad Andina, en la que recibían con la alta condición de Académico, al valioso cirujano de cerebro, Dr. Felipe Egas Varea.
Para quien escribe esta nota es complicado entender y explicar con acierto las exposiciones sobre tema tan especializado y ajeno a nuestros conocimientos, pero no es difícil recordar que el Dr. Egas Varea, muy joven, graduado en el exterior comenzó a prestar sus servicios en el Hospital Metropolitano, en donde -al parecer- labora hasta hoy, con grandes éxitos en la cirugía de su especialidad, trabajando -como todo ser humano valioso- con sencillez, espíritu de servicio, dedicación sin horarios; igual que el Dr. Reinaldo Páez realizando operaciones en el cerebro; uno y otro, sin hacer de la cirugía especializada una fuente de riqueza personal.
En nuestro parecer, reemplazar profesionales de tanta especialización con similares de otro país, provocaría consecuencias funestas para los pacientes que requieren atención urgente.