La posibilidad de solucionar la crisis y terminar con “el baño de sangre” en Kiev es muy fuerte, declaró el jueves, 23 de enero, Arseni Iatseniuk, uno de los líderes de la oposición en Ucrania.
“Nuestro objetivo es terminar con el baño de sangre y las posibilidades son muy fuertes”, dijo Iatseniuk a la prensa al cabo de varias horas de negociaciones con el presidente ucranio Viktor Yanukovich.
El dirigente del partido Batkivchtchina (Patria), que dio el miércoles por la noche 24 horas al poder para presentar concesiones, no dijo más sobre el contenido concreto de las discusiones.
La administración presidencial se limitó a indicar en un comunicado que el encuentro duró cuatro horas.
El ultranacionalista Oleg Tiagnybok dijo por su parte que las “consultas” eran necesarias.
El presidente Viktor Yanukovich pidió hoy que el Parlamento debata las exigencias de los manifestantes antes del encuentro con los líderes de la oposición y tras los violentos choques que dejaron cinco muertos el miércoles.
Yanukovich recibió al presidente del parlamento, Volodymyr Rybak, y le pidió que convocara a los diputados para “resolver pronto” la crisis y para que validen el resultado de las negociaciones previstas con la oposición, según un comunicado de la presidencia.
Yanukovich se reunió con los líderes de la oposición luego de que lanzaran el miércoles un ultimátum tras un primer encuentro infructuoso con el jefe de Estado.
Uno de los líderes de la oposición, el exboxeador Vitali Klitschko, pidió este jueves a los manifestantes y la policía que se enfrentan en el centro de Kiev que mantengan una tregua durante el encuentro.
La situación fue tensa en la mañana de este jueves, con un intercambio de cócteles molotov y adoquines, por parte de los manfestantes, y granadas ensordecedoras de la policia.
EEUU saludó anuncio de diálogo
Estados Unidos saludó el anuncio de que el gobierno de Ucrania planea dialogar con la oposición tras cinco días de violentas manifestaciones e instó al presidente Viktor Yanukovich a buscar una “solución pacífica” a la crisis.
“El vicepresidente (Joe) Biden alentó al presidente Yanukovich a buscar una solución pacífica a la crisis”, señaló la Casa Blanca en un comunicado.
La Unión Europea (UE) llamó de nuevo al diálogo y pidió garantías al poder ucraniano.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, solicitó a Yanukovich “celebrar un diálogo de alto nivel”, durante una conversación telefónica en la que obtuvo la garantía de que el poder no iba a decretar el estado de emergencia, indicó el Ejecutivo comunitario.
“Por su parte, la canciller alemana, Angela Merkel, pidió al gobierno ucraniano “garantice las libertades fundamentales” y que “no recurra a la violencia”. La jefa del gobierno alemán, se dijo “indignada” por la adopción la semana pasada de unas leyes que endurecen las sanciones para los manifestantes.
Y el expresidente soviético Mijail Gorbachov pidió a los presidentes ruso, Vladimir Putin -cuyo país prometió no intervenir-, y estadounidense, Barack Obama, que negocien personalmente una solución.
En una intervención el miércoles por la noche antes decenas de miles de personas en la plaza de la Independencia, epicentro de las movilizaciones, el líder del partido de la opositora encarcelada Yulia Timoshenko, Arseni Yatseniuk, dio 24 horas al gobierno para detener el “baño de sangre”.
“Si Yanukovich no hace concesiones mañana (jueves) pasaremos a la ofensiva”, declaró por su parte Klitschko.
La oposición reclama la convocatoria de elecciones anticipadas para poner fin a la contestación, que comenzó hace dos meses, después de que Yanukovich decidiera no firmar un acuerdo de asociación con la UE, optando por un acercamiento a Rusia.
Tras un enfriamiento de la contestación, las protestas se recrudecieron después de la adopción que endurecen las sanciones contra los manifestantes.
La protesta degeneró el domingo, 19 de enero, en unos actos violentos que se intensificaron aún más el miércoles, con varios asaltos de las fuerzas antidisturbios sobre las barricadas de los manifestantes en la calle Grushevski, cerca de la plaza de la Independencia.
El coordinador del centro médico de la oposición, Oleg Musiy, indicó el miércoles que se habían registrado cinco muertos y unos 300 heridos. Según la página web de Ukrainska Pravda, cuatro de los muertos tenían impactos de bala.
Las autoridades anunciaron la detención de al menos 73 personas desde el domingo.
Más de 250 miembros de las fuerzas de seguridad resultaron heridos, de los que 104 fueron hospitalizados.