Un cambio de recursos esenciales como la infraestructura de los juzgados, podría contribuir notablemente con el progreso de la Justicia. Tanto es así, que podemos notar el leve mejoramiento que adquiere el sistema judicial con su introducción al campo tecnológico, lo cual a pesar de ser insignificativo, ha traído hasta el momento mejoras en el rendimiento de la Función Judicial. Así mismo, aspectos como la buena disposición de un juez o de una secretaria en los juzgados, podría generar un cambio positivo en el manejo de la Justicia, ya que si no se presenta un cambio en la actitud humana de los funcionarios judiciales, seguiremos viendo la realidad de un sistema judicial deficiente. Estos cambios nos dejan ver que se debe continuar emprendiendo un aumento en la calidad de la Función Judicial, a través de la corrección de detalles mínimos, para lograr un progreso significativo en la administración de justicia.