Lo más cercano que he visto, leído, escuchado, etc., de que se infiltren agentes en los hospitales para observar sus actividades “políticas” y no médicas ha sido en el gobierno socialista de Allende en Chile por parte de agentes de la CIA.
Ahora me preocupa muchísimo que el mismo presidente Correa, identificado, así se ve, con el populismo y quizá la derecha política, hace igual que EE.UU. en Chile hace décadas, infiltrar agentes, seguro no solamente es en hospitales, para que quienes no cumplan a cabalidad sus funciones sea separado. Me pregunto ¿está un policía en capacidad de evaluar a un médico? O viceversa, claro que en lo profesional, no rotundamente.
Entonces es un atropello total a la dignidad de una profesión por antonomasia ética, moral, científica. Si no cundiera el miedo en este país ya debería haber actuado la Defensoría del Pueblo y los gremios. Le pregunto al Presidente y a su círculo: ¿quiénes son los médicos que le operaron la rodilla y que ven sus dolencias? ¿Quizá extraterrestres…? Incluso médicos que han colaborado con el Gobierno como Milton Jijón A., han sido “renunciados” sin reemplazo. Protesto y debemos estar atentos de quiénes son y qué currículo tienen los que reemplacen y sobre todo sus resultados con los pacientes.