Los reyes de España dieron este jueves 8 de julio del 2021, el pistoletazo oficial a la 40 edición de ARCO, la feria de arte contemporáneo más importante de España, que se celebra este año de manera excepcional en verano por la pandemia y con un formato más pequeño.
La feria salvó su edición de 2020 apenas dos semanas antes del confinamiento. Este año ARCO es más pequeño, no cuenta con país invitado ni un tema y solo asisten 130 galerías -frente a más de 200 en 2020-. La arquitectura también es muy diferente: los pasillos son más amplios, se ha reducido el aforo al 50 por ciento y hay controles de temperatura a la entrada y salida de los pabellones.
Los reyes han visitado las galerías veteranas españolas, se han parado en una de las más importantes galerías francesas, Thaddeus Ropac, y en la portuguesa Pedro Cera y han hecho un alto en “Remitente”, un espacio donde se exponen una pequeña selección de obras de las galerías latinoamericanas que no han podido venir por la pandemia.
También visitaron Senda, una galería catalana, y se han detenido ante “Terracota”, el proyecto de Carla Cascales, una joven artista que trabaja sobre la conexión con la tierra hecho con piedras de distintos puntos de la geografía española. Esta obra se enmarca en “Proyectos de artista”, una iniciativa de la feria que muestra obras de artistas en solitario y que este año está destinado exclusivamente a creadoras, con el objetivo de incentivar el número de mujeres creadoras presentes en la programación.
ARCO cumple así su 40 edición, un aniversario que debía haber celebrado por todo lo alto, pero se ha visto obligado a posponer los festejos al año que viene, cuando las condiciones sean más favorables. Su programación excepcional tiene este año un día más dedicado a los profesionales y se prolongará hasta el domingo. El fin de semana estará dedicado al público general aunque se prevé menos multitudinario que años anteriores por las restricciones de aforo y las fechas veraniegas.