La partida del presidente venezolano al más allá nos trae a las mentes de los ecuatorianos el recuerdo de cómo ha quedado Venezuela luego de 14 años de hacer y deshacer en el hermano país venezolano, la Saudi Arabia de América del Sur, los que hemos tenido la oportunidad de visitarlo pudimos captar de inmediato lo que el sistema implantado por él y su revolución ha generado en un país que debería estar en la cúspide del desarrollo en todos los campos y la realidad es totalmente lo contrario, ¿cómo poder imaginarnos que algún país en el mundo desee parecerse a Cuba? La situación llanera está a la espera de una convocatoria a elecciones la misma que con el recuerdo fresco de la muerte del comandante el candidato oficialista tendría un margen sobre Carpirles y esto prolongaría el malestar social que podría traer un desenlace poco deseado ya sin la presencia de Chávez.
Sin querer hacer comparaciones pero está claro que los gobiernos que se perpetúan en el poder terminan por hacerles un daño a sus sociedades, al margen de cómo trabajen unos y otros en sus respectivos países, el Ecuador enfrenta 4 años más de Revolución Ciudadana en la que anhelamos el presidente Correa siga transformando el país con sus obras, pero sin acosar a la clase media que ya se halla agobiada por impuestos y ajustes tributarios cada vez más fuertes, esperemos que su liderazgo lo lleve al éxito también hasta el 2017 y deje el poder para que el país se oxigene.