Y se lanzó la campaña, que ya estaba medio lanzada. Oficialmente, ayer se dio la señal de partida, con algo de todo. Manifestaciones de uno que otro partido –restos de la partidocracia- y de muchísimos movimientos, comenzando por el ya famoso País, además de grupos y grupúsculos de los más diversos orígenes, tamaños y calañas. Siempre -desde hace cuatro increíbles años- con el Jefe a la cabeza, sin parar un minuto en los recorridos, concediendo entrevistas diarias a las emisoras independientes, retransmitidas y multiplicadas por los medios oficiales. Con respuestas correístas a las preguntas, aclaración de los anexos, explicaciones sobre el control de la justicia y de la información, todo de acuerdo con las normas tan largamente discutidas por el CNE y aprobadas para que la arremetida no suene a “campaña”.
El “si” funciona, pues, con la popularidad del Jefe a la cabeza y con el apoyo de los dirigentes de País que no se han desafiliado en estos cuatro años. En los debates que arman los medios desfilan y suman su aporte los asambleístas de la mayoría, casi en riguroso turno y haciendo méritos hasta que vuelva la Asamblea. Los grupos opositores afirman que han aumentado, por lo menos en el número de aspirantes a las franjas publicitarias. Cauce Democrático jura que el Flaco Hurtado se crece en las consultas, como sucedió en los tiempos febrescorderistas. César Montúfar propone por décima vez la unión entre los hinchas del “no”. Betí Acosta responde simplemente que no. Aclara que su “no” no es negativo como el de otros. Ruptura 25 yace en una posición discreta hasta que la ministra Soliz suelta el chisme de que María Paola y los suyos están por el no-no a todas las preguntas. Respecto al coronel Lucio y Madera de Guerrero, ellos proclaman el no, no y no. El alcalde Nebot guarda un silencio poco elocuente. Inclusive parece que le gusta el “si” para un par de preguntas. ¿No quiere chocar, por esta vez, con el Jefe? ¿Ya no importa que aumente el tamaño del “si” –y del Jefe- en su baluarte? ¿Cuál es su misterio? ¿Definitivamente ya no le interesa una candidatura nacional para cerrar su vida política? ¿O talvez sí? Para los del “si” la cosa es más fácil. Mientras su Jefe interprete bien las normas del CNE y siga siendo el rey de la campaña, todo está consumado, consumido y solucionado. La mayoría no sabe ni quiere saber de las preguntas pero ya está bien entrenada con seis concurrencias a las urnas. Ergo’
Claro que la consulta es un cauce democrático. Pero las preguntas también deben ser muy democráticas, lejos de plantear perspectivas ingratas de un control de la justicia y de los medios por parte del ya poderoso Ejecutivo, los dos temas más debatidos a estas alturas. La campaña está lanzada. No serán tomados en cuenta los votos nulos y blancos. La respuesta a las inquietudes tendremos el sábado 7 de mayo. Dentro de muy pocos días.
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