A comienzos del siglo pasado las familias guayaquileñas utilizando el transporte marítimo se trasladaban de Guayaquil a Posorja para pasar las vacaciones de invierno. Ese era el balneario favorito de la época conjuntamente con Ancón y Salinas. Los tres poblados se dedicaban a la pesca. Ancón además era un pueblo petrolero en donde se asentaban los ingleses de la Anglo. A mediados de siglo Víctor Emilio Estrada se le ocurrió la idea de desarrollar el balneario de Playas para que se convierta en el futuro en un suburbio de Guayaquil. Construyó el hotel Humboldt que era una verdadera joya arquitectónica con todas las comodidades de un hotel de cinco estrellas. Al frente del hotel que daba al mar construyó un rompeolas para que pudiera acoderar su yate el Isabel Victoria. Esta obra sería la que se encargaría años después en formar una inmensa playa que hoy recibe a miles de bañistas. Promovió la construcción de una ciudadela que la bautizó con el nombre de Victoria en honor al segundo nombre de su esposa. En esta ciudadela y al frente de ella en un sector conocido como la raqueta se construyeron algunas de las casas de las familias guayaquileñas que pasaban sus vacaciones en la playa. Para formar a la juventud bajo la disciplina militar, fundó la Academia Militar Juan Gómez Rendón institución que tenía una estupenda infraestructura física y académica para albergar a profesores y estudiantes durante el ciclo lectivo. Por esa institución pasaron algunas generaciones. Hoy muchos son exitosos profesionales que se han desempeñado con acierto en los sectores público y privado. Los mejores deportistas del Guayas salieron de sus aulas. La Playas que soñó Estrada no se pudo consolidar en su época. Las familias preferían Salinas por su conexión con Guayaquil por medio del ferrocarril y posteriormente por la carretera. La Academia tuvo que cerrar al final de la década de los sesenta. La Fundación Tomás Martínez, encargada de administrarla, tuvo que cerrar por problemas financieros, y así terminó una de las instituciones educativas más emblemáticas de la época. Ahora el sueño de Estrada toma fuerza con la autovía Progreso-Guayaquil. En menos de una hora los guayaquileños puedan llegar a dicho balneario. Este feriado de Carnaval los turistas rebasaron la capacidad hotelera. Anuncios de urbanizaciones en la vía a Data son promocionadas y dentro de pocos años con el esfuerzo del sector privado Playas se convertirá en el primer balneario del Guayas. Si uno camina por sus calles observa como el tiempo se detuvo y la infraestructura que alguna vez existió está deteriorada. Con los nuevos desarrollos inmobiliarios dependerá de los recursos que aporten los contribuyentes para que Playas finalmente despegue.