Participantes en la Cumbre del G8 en Deauville (Francia) defendieron el jueves la candidatura de la ministra francesa de Economía Christine Lagarde al frente del FMI, cargo que reclaman los emergentes y sobre el cual se pronunciaron India, China y Sudáfrica.
“Pensamos que sería apropiado que el director del FMI fuera un europeo”, dijo Sarkozy en rueda de prensa tras considerar que el nombramiento de un europeo está justificado por la actualidad económica del Viejo Continente en alusión a la crisis de las deudas soberanas en la Eurozona.
“Tratándose de la gobernanza del FMI, soy europeo y usted ve la actualidad monetaria de hoy: está más del lado de Europa que de los emergentes ” , argumentó Sarkozy luego de indicar que la designación del nuevo director gerente del FMI, que no está en la agenda oficial de la Cumbre, se abordó en bilaterales pero no en las sesiones de trabajo plenarias.
El presidente de la Unión Europea (UE) , el belga Herman Van Rompuy, fue el primero en respaldar públicamente la candidatura de Lagarde en Deauville.
“Es europea pero no la apoyamos por ser europea. No por ser europea debemos combatirla”, afirmó Van Rompuy.
Aunque aclaró que “no estamos aquí para hacer lobbying”, dijo que “si algunos quieren hablar, subrayaremos todas sus cualidades”.
Desde antes del inicio de la Cumbre estaba claro que los dirigentes de las ocho economías más importantes del mundo con peso en el consejo de administración del FMI iban a hablar sobre la sucesión de Dominique Strauss Kahn, quien renunció a la dirección de ese organismo tras su inculpación por intento de violación en Estados Unidos.
La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, dijo el miércoles en París que “oficialmente” su país espera el cierre del plazo de presentación de candidaturas para pronunciarse pero “oficiosamente somos favorables a que mujeres muy calificadas y experimentadas puedan dirigir instituciones mayores como el Fondo Monetario Internacional”, agregó en una declaración que no deja ninguna duda.
Rusia, que forma parte del selecto club de los ocho pero también integra los BRICS (que forma junto a los otros principales emergentes Brasil, India, China y Sudáfrica) consideró que ese grupo debería tener una “más amplia representación” en el control del FMI.
En consonancia con el peso de sus economías en el mundo actual, los emergentes reclaman la dirección del FMI que desde 1945 ocupa un europeo.
Tras protestar en un comunicado emitido el martes contra la voluntad de Europa de conservar el puesto de director gerente del FMI, China, India y Sudáfrica volvieron a manifestarse el jueves.
China reclamó que el nuevo director gerente del FMI sea designado tras una “consulta democrática” que contemple “una mejor representación de los mercados emergentes”.
El ministro indio de Finanzas, Pranab Mukherjee, declaró que está en contacto con sus pares de varios países emergentes para apoyar a un candidato consensuado entre ellos.
Varios nombres, entre ellos el ya declarado candidato Agustín Carstens, presidente del Banco Central de México, circulan sin lograr un respaldo unánime.
El miércoles el primer ministro indio Manmohan Singh llamó a los emergentes a unirse para reformar la institución financiera.
Y el gobierno sudafricano insistió en que el próximo director general del FMI debe ser de un país en desarrollo, dijo el portavoz Jimmy Manyi.
Lagarde viajará ” en los próximos días ” a China y a Brasil, indicaron el jueves fuentes de su cartera.
Su candidatura podría verse afectada por una investigación judicial sobre el papel de la ministra en un litigio judicial a favor del ex empresario francés Bernard Tapie que recibió del Estado 385 millones de euros. Lagarde había asegurado que recibiría entre 30 y 50 millones.
Van Rompuy insistió el jueves en Deauville en que Lagarde, de 55 años ministra de Economía desde 2007, elogiada por su excelente inglés, ” es una candidata de gran experiencia ” que ” no sólo tiene apoyos en Europa sino también en otros países del mundo ” .