La rampa dos del intercambiador de Carapungo fue habilitada al tránsito ayer. La tres se cierra temporalmente. Paúl Rivas / EL COMERCIO
La conformación de la calzada, la construcción de ciclovías, redondeles y el movimiento de tierras son parte de los trabajos que se realizan en la prolongación de la avenida Simón Bolívar, en el norte de la urbe. En la construcción de esta vía se registraron algunos cambios, por ejemplo, la fase tres no se ejecutará y hubo variaciones en la ingeniería vial.
La extensión de la Simón Bolívar va desde el intercambiador de Carapungo hasta el sector de Maresa. En total son 12,1 kilómetros y 2,8 más hasta el sector de Tajamar. En el trazado anterior, la vía llegaba hacia La Marca (atrás de la Mitad del Mundo). Ya no será así.
El motivo es que este sector fue considerado como una zona de riesgo. Así lo indicó Alejandro Larrea, gerente de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop). “La prolongación no llegará a La Marca porque hay una suspensión de ese tramo por parte de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos”, sostuvo.
Además se hicieron evaluaciones en otros tramos que fueron considerados zonas de peligro. “En sectores como Liga se realizaron unos ajustes de ingeniería vial para darle estabilidad al terreno”. El resto del trazado se mantiene, dijo.
Ayer, en un recorrido con las autoridades de la Municipalidad se constató que el avance de esta obra es del 35 por ciento. La meta es que los trabajos concluyan a finales de año o inicios del 2017.
La construcción de esta obra tiene como objetivo mejorar la movilidad en este sector del norte del Distrito. Así lo señaló el alcalde Mauricio Rodas, que estuvo presente en el recorrido por la Simón Bolívar y en la habilitación de la rampa dos del intercambiador de Carapungo. “Estas obras ayudan a disminuir el tiempo de recorrido de las personas que circulan por esta arteria. Va a representar un cambio radical en la zona, porque se podrán movilizar de forma rápida”, sostuvo el Burgomaestre.
La vía tiene tres carriles a cada sentido. Se suma una ciclovía separada para que los ciclistas tenga su espacio para transitar. “Las ciclovías se construyeron bajo parámetros técnicos. No serán pintadas, por lo que es una buena forma de fortalecer la movilidad sostenible”, explicó Rodas.
Además, hay vías de conexión para que las personas que viven en Carapungo salgan con tranquilidad hacia la av. Simón Bolívar. Lo que implica que se reduzcan los tiempos de circulación en el sector. “Se abrirá una nueva vía para los pobladores de Carapungo, quienes actualmente solo tienen una ruta de salida: Marianitas”, aseguraron los técnicos de la obra.
Para la prolongación de la arteria, que tiene un costo de USD 78 millones, se realizó un promedio de 350 expropiaciones. Al momento se trabaja con 135 predios por expropiar. Larrea dijo que es un proceso de larga duración ya que se deben llegar a acuerdos con los propietarios de los inmuebles.
La rampa dos se habilitó
Ayer se realizó la apertura de la rampa dos del intercambiador de Carapungo, que registra un avance del 60 por ciento. Ahora, los carros que circulan por la Panamericana Norte podrán conectarse con facilidad hacia Carapungo. Lo harán por la calle Luis Vaccari.
La habilitación de este paso implica el cierre de la rampa tres, que se abrió temporalmente hace unas semanas. La decisión se tomó porque sobre esta se construirá un paso superior. El cierre durará 10 semanas y arrancará desde el próximo martes.
Con esta habilitación se busca solucionar los problemas de congestión vehicular que se originan en la intersección de la Panamericana Norte con la Simón Bolívar, comentó Fernando Morocho, administrador zonal de Calderón. “Habrá mayor fluidez”, dijo.
El funcionario explicó que en horas pico se registra una congestión fuerte, por lo que es importante que esta obra avance en buenos tiempos. “La movilidad en este sector mejorará. Al igual que otras situaciones como la plusvalía y el comercio”, indicó.
En el evento estuvieron presentes moradores de Carapungo. José Morales vive en este sector más de 20 años. Señaló que es necesario hacer obras adicionales como la iluminación en la zona peatonal para evitar la inseguridad cerca del intercambiador. “Necesitamos que las autoridades ayuden con este tipo de trabajos para transitar con tranquilidad”. Lorena Flores, otra moradora, dijo es importante que se realicen obras encaminadas a velar por la seguridad del peatón.