En su informe a la Nación, la economista Nathalie Cely, ministra coordinadora de la Producción, Empleo y Competitividad, señaló que “nuestras exportaciones llegan a más de 150 países”.
Si bien esta cifra es oficial, amerita ser en algo depurada con el objeto de que la opinión pública tenga una idea más acorde a la realidad sobre el destino de nuestras exportaciones. Con este propósito, comparando las exportaciones registradas en los años 2007 y 2014, se observa que en el 2007 se exportó a 165 países y en el 2014 a 161; es decir, la situación casi se mantuvo y es acorde con lo manifestado por Cely. Pero en estas cifras se incluyen como destinos algunos países que realmente no lo son, debido a que registran valores de exportación mínimos, que en su mayoría, no corresponden a productos producidos localmente. En consecuencia, no forman parte de la estructura exportable que es lo que debe destacarse. Para tener una idea más cercana a la realidad consideremos, por ejemplo, como un verdadero destino aquel al cual se exportó por lo menos USD 1 millón al año. En función de este valor, se observa que en el 2007, Ecuador exportó a 79 países y en el 2014 el número de países destino subió a 97. Si este valor lo subimos a USD 10 millones, se observa que mientras en el 2007 fueron 46 los países de destino, en el 2014 este número subió a 62. Finalmente, de todos los destinos de la exportación ecuatoriana cabe destacar en el 2007 a EE.UU. y Perú, a los cuales, incluido petróleo, se exportó por encima de USD
1 000 millones, destinos importantes que en el 2014 se mantuvieron y a los cuales se sumaron Chile, Colombia y Panamá. Respecto a estos destinos, cabe recordar que gran parte de las exportaciones a EE.UU. se hace con cargo a una preferencia arancelaria unilateral, que puede terminarse en cualquier momento.
Las exportaciones a Chile, Colombia y Perú se realizaron con cargo a una preferencia arancelaria del 100% negociada en los pocos acuerdos de comercio que tiene suscrito el país.